El conjunto de Anquela se ha resentido en la faceta defensiva en los últimos partidos, y muestra de ello son las dos últimas derrotas, en las que el equipo oscense ha encajado cinco goles.
Tras el encuentro frente al Real Valladolid el Huesca sigue sin dejar la portería a cero y suma tres jornadas con este sorprendente dato viendo el inicio de temporada en el que el conjunto azulgrana fue uno de los menos goleados. Se ha roto esa fortaleza defensiva que caracterizaba a los de Anquela encajando seis tantos en estos tres últimos encuentros.
Constantes rotaciones
Una de las posibles causas por las que el equipo oscense ha perdido esa faceta puede haber sido por las constantes rotaciones en defensa que ha tenido que hacer el técnico jienense a lo largo de estas jornadas.
Ya se han repartido minutos a todos los defensas, empezando por el lateral derecho en el que Akapo ha sentado a Nagore. En el centro de la zaga Jair ha prevalecido en todas las jornadas mientras el otro puesto ha sido ocupado por hasta tres integrantes: Carlos David, Íñigo López y un Jesús Valentín que ha pesar de haber jugado más tiempo en el centro del campo esta campaña también disputó varios minutos como defensa. Además, la irregularidad de César Soriano ha dado lugar a la entrada del serbio Rajko Brezancic, que tampoco ha llegado con las expectativas que el respetable oscense esperaba pese a hacer una buena actuación frente al conjunto pucelano.
La zona de la zaga va a volver a ser un quebradero de cabeza para el míster azulgrana que, aunque pareciera haber resuelto esa faceta a principio de temporada, últimamente está mostrando varias fisuras que no le contentan del todo con el trabajo defensivo que ha realizado el equipo en las últimas actuaciones.