LaLiga ha hablado y ha fallado en favor del Extremadura. Después de que ambas partes expusieran sus defensas ante el caso Enric Gallego, el juez de la liga ha decidido que la SD Huesca tendrá que pagar 600.000 euros a los de Almendralejo; es decir, el 10% de lo que recibieron los oscenses por el pago del Getafe.
Y es que ese porcentaje se reflejó en uno de los puntos que pactaron los dos equipos cuando el Huesca compró, en el mercado de invierno del 2019, al delantero catalán; un 10% de beneficios futuros que sacaran por su traspaso. Sin embargo, los azulgranas defendieron que la marcha del jugador al Getafe no ocurrió por negociaciones, sino porque el conjunto madrileño pagó la cláusula de 6 millones de euros; por ello, la parte beneficiada no tenía por qué pagar al Extremadura.
Ante esto, LaLiga ha decidido que, aunque se tratara de un pago de cláusula de Enric Gallego, cuenta como un traspaso y por ello, el Huesca deberá abonar el 10% de lo recibido; es decir, 600.000 euros.
Una marcha dolorosa para todos
Uno de los mayores temores que tenía la afición azulgrana tras el descenso a Segunda División, era la marcha de jugadores que tanto significaban para la SD Huesca. Futbolistas que habían demostrado calidad y amor por el club. Uno de ellos fue Enric Gallego. El catalán llegó en el mercado de invierno y fue un aire fresco para el equipo, encontrando ese gol que tanto les estaba costando a los de Francisco.
Los mayores temores de la afición, se cumplieron, y el Getafe llegó dispuesto a pagar los 6 millones de euros de su cláusula. La SD Huesca deseó toda la suerte a un Enric Gallego que comenzaba una nueva aventura en un equipo que iba a jugar la Europa League. Sin embargo, el catalán no llegó a entrar en los planes de Bordalás y solo disputó ocho partidos. Por ello, se marchó cedido al Osasuna en enero donde, pese a disfrutar de más minutos, todavía no ha encontrado el gol.