Una única jornada resta para finalizar la Liga Endesa y todo está por decidir. Ninguna de las dos plazas de descenso tiene dueño, si bien es cierto que Casademont Zaragoza cuenta con muchos boletos para ocupar una de ellas, dado que no depende de sí mismo.
El equipo de Dragan Sakota, como reconocía el balcánico, ha elegido el camino más difícil posible para mantener la categoría. Para empezar, porque ganar el sábado en la pista de UCAM Murcia no será nada sencillo. El equipo de Sito Alonso se juega entrar en Play Off si vence y el Gran Canaria pierde ante el Real Madrid.
Aún así, la victoria en Murcia no sería suficiente. Debería producirse alguna derrota del Fuenlabrada (visita al Burgos, colista), Andorra (recibe al Lenovo Tenerife) o del Real Betis (visita al Bilbao Basket).
Salvarse perdiendo
La otra cara de la moneda, es que la derrota no implicaría directamente el descenso. En ese caso, no queda otra que desear con todas las fuerzas que el Fuenlabrada sea capaz de ganar en Burgos. Los madrileños tan solo se han impuesto en un partido fuera de casa en todo el curso (y fue precisamente en Zaragoza). La tercera condición necesaria sería que se uniera la derrota de Andorra ante Tenerife.
