ZARAGOZA | La temporada ha sido un completo fracaso. Nada ha salido como se esperaba a principio de temporada y se ha acabado peleando por un objetivo radicalmente distinto. Con tres entrenadores de por medio, no son pocos los jugadores que han quedado señalados por la afición y que constituyen las grandes decepciones de la temporada.
Las decepciones en el ataque
El ataque ha sido probablemente la peor faceta del Real Zaragoza. Azón ha sido el delantero que más goles ha anotado con 5 goles. La mayor decepción de la temporada ha sido sin duda el fichaje de Sinan Bakis. El turco llegó al Real Zaragoza después de una buena temporada con el Andorra y con la vitola de delantero estrella. Media segunda se peleaba por él pero Cordero fue más rápido que nadie. Sin embargo, la realidad ha sido totalmente diferente.
No ha logrado celebrar ningún gol y es ya la cuarta temporada que el delantero estrella del Real Zaragoza se estanca en esa cifra. Se une a una vergonzosa lista con nombres como Pape Gueye, Toro Fernández o Sabin Merino. Además de su nula aportación goleadora, su aportación en la mayoría de partidos ha sido muy pobre, restando más de lo que ofrecía. Tanto, que Víctor lo ha llevado al ostracismo y ha sido superado por todos en la rotación. Sin embargo, su agente lo sigue viendo dentro del Real Zaragoza en la próxima campaña.
Sergi Enrich cerró la delantera, pero su situación ha sido diferente a la de Bakis a pesar de poder catalogar también su fichaje como una decepción. Enrich nunca fue visto como un delantero con oportunidad de poder jugar 90 minutos, y sus tres partidos como titular le avalan. Sin embargo, ha sido el cambio más recurrente pese a que no ha aportado nada en la mayoría de partidos. De hecho, hasta las últimas jornadas no hemos visto la mejor versión del delantero balear, anotando dos goles en las últimas tres jornadas. Los últimos partidos han sido una lucidez terminal, pues parece que su futuro está lejos de La Romareda.
Con los cedidos cerramos las decepciones en la delantera. Manu Vallejo apenas ha aportado algo en toda la temporada. Casi no ha disputado minutos, ni de premio cuando anotó algún gol. Su rendimiento ha sido muy pobre, habiendo perdido la explosividad que le caracterizaba. German Valera, pese a no haber sido una gran decepción, no ha cumplido las grandes expectativas que traía consigo. No ha aportado en números y a cuentagotas en juego.
Las decepciones en defensa
Otra de las grandes decepciones de la temporada se encuentra en la portería. No tanto por las expectativas, sino por todo lo que ha supuesto su rendimiento. El aficionado zaragocista todavía se pregunta qué habría ocurrido esta temporada si Gaetan Poussin no hubiera plantado aquel balón en el Molinón. Sus paradas y actuaciones se han visto gravemente opacadas por errores infantiles que le han costado infinidad de puntos, sensaciones y un bochorno en Copa del Rey.
En defensa, otra de las decepciones, pese a no ser de las más claras, se encuentra Jair Amador. El portugués ha sido otro a lo que fue la temporada pasada. No se ha encontrado de la misma manera con Alejandro Francés y sigue siendo una piedra en el engranaje a la hora de sacar el balón. Si a eso le sumas un rendimiento defensivo que deja mucho que desear, encontramos que el segundo capitán no ha estado a la altura de su bagaje.
Por último, la última decepción de la temporada no se trata de un jugador, sino algo que ha afectado a la gran mayoría de la plantilla durante toda la temporada. La plaga de lesiones. El Real Zaragoza ha sufrido muchísimo a causa de la gran cantidad de lesiones que ha tenido en este curso, llegando a tener que abastecer de canteranos las convocatorias para poder llenarlas. Únicamente Francés, Jair Amador, Jaume Grau y Sergi Enrich no han sufrido ningún problema físico que les ha impedido jugar.
Todavía hay más jugadores que no han rendido tan bien como se esperaba. Al fin y al cabo, nada ha salido bien. Sin embargo, estas han sido las decepciones más flagrantes y probablemente las situaciones más irrecuperables.