HUESCA | `Cuco´ Ziganda tiene dos caras, una pública y otra privada y el club ha querido acercar el lado más oculto tras la primera victoria de la temporada. El preparador de Larrainzar es un líder y un motivador dentro del vestuario, aunque en sala de prensa parece otro. Esto dijo tras el partido de Santo Domingo dentro del vestuario. “Atacar como una p**a manada y defender como un p**o ejército. Ese es el camino, no podemos bajar. Muy bien, felicidades”, explicaba ante la cámara del club en la arenga a sus futbolistas.
El técnico es el gran protagonista de la semana después de Alcorcón, ya que Ziganda llegaba tras unos cánticos de El Alcoraz en el que le pedían “`Cuco´, vete ya”. El entrenador respondió a esos cánticos tras el partido: “Lo he escuchado y es duro, pero es fútbol. No me gusta, pero no me va a afectar. No nos gusta que nos critiquen, pero tienes que saber aceptarlo, y tienes que saber llevarlo de una manera que no te afecte a nivel profesional. El grupo demostró que no se rendía y fue capaz de hacer el golazo que hizo”.
El entrenador recibió el apoyo de su plantilla y del director deportivo durante la semana, pero llegaba en una situación límite a Alcorcón. En caso de derrota en Santo Domingo, podría haber sido cesado como en la última semana le pasó a Víctor del Cartagena o a Cervera en el Real Oviedo. Él analizó su situación personal antes del partido: “Si hoy no fuese entrenador del Huesca y estuviese en el pueblo andando en bici y me dijesen: Oye, ¿quieres ser entrenador del Huesca? Vendría con todas las ganas y todas las posibilidades y pensando que hay plantilla para sacar esto adelante. Vendría encantado de la vida. Creo que tenemos margen de mejora. No estoy contento. Sé que es una posibilidad en el fútbol. Hay que dar un ejemplo y demostrar que aquí nadie se rinde”.
Ziganda tras el partido del Huesca en Alcorcón
Ziganda tras el partido y la victoria por 0 a 2, volvió a ser en sala de prensa esa persona educada que se transforma con sus jugadores en el vestuario. Tras salvar el posible ultimátum del club, el técnico no se olvidó de sus jugadores: “El grupo es una piña con buen espíritu. A pesar de los resultados no se caen y les duelen los resultados. Es una gente muy noble y sanos. No se ha resquebrajado en ningún momento. Es una fortuna tener a estos jugadores.”