El Levitec Huesca La Magia certificó en Oviedo su mala temporada. El descenso a LEB Oro era un hecho, hoy ha sido certificado. Arrancó el Oviedo con ganas. Quizá el haber caído en la primera vuelta le espoleó. La competición está en un momento donde ya no te puedes despistar y pisó el acelerador. Un parcial de 9-0 `para empezar obligó a que Calos Lanau parara el reloj en menos de tres minutos. Mano de santo. Un triple de Casanova sumado a una canasta de Lafuente en una contra acortó más que la diferencia en el electrónico alejó cierta desazón en las filas oscenses.
La reacción fue un fogonazo, porque Oviedo volvió a meter diferencias y mediado el primer cuarto gobernaba en el electrónico con un claro 26-9. Commo era de esperar, el Peña compareció sin Sikiras. La lesión en un hombro, al colisionar con Marc Gasol en el encuentro contra Girona, fue una baja sensible. Lafuente, un partido más, tuvo que hacer de 4. Más cuando pierdes músculo en una defensa que se deshizo en el primer cuarto ante los asturianos. El 31-19 fue claro reflejo de lo sucedido.
Mejoraron los de Carlos Lanau en el inicio del segundo cuarto. Llegó a ponerse en la frontera psicológica de 10 ante un Oviedo que, visto lo visto, volvió a apretar. El quinteto asturiano manejó el partido en el punto que quiso. Siempre con el Peñas lo suficientemente alejado en el marcador para no peligrar su victoria y administrando tiempos por si fuera necesario apretar un poquito el acelerador.
Ante un imposible
La segunda parte se abrió con 51-34 en el electrónico y la realidad de que el Oviedo manejó el partido sin oposición. La empresa para intentar dar la vuelta al marcador fue otra vez descomunal para los de Carlos Lanau. En el intercambio de canastas, el Peñas se sostuvo en el partido, pero no podía acortar la diferencia y Lazcano, entrenador del Oviedo era fiel reflejo de que esa propuesta de su equipo no le gustaba. No quería que, en un descuido, el rival se metiera en el partido.
El cabreo del técnico surgió efecto y a poco más de un minuto para finalizar el tercer cuarto, Oviedo superaba la diferencia de 20 puntos a su favor, con el 74-53 en el marcador. El partido se quedó sin historia. Lo único que le quedó favorable al Levitec es que le metió intensidad, que buscó caer con la mayor dignidad posible en una temporada a la que le quedan partidos, pero como única meta la de hacerlo lo mejor posible y jugar para recobrar la ilusión de su parroquia.
Ficha técnica
Oviedo: Atencia (12), Lundqvist (21), Kamba (12), Arteaga (10), MC Donnell (10). Quinteto inicial. Jorgensen, Meana (5), Bartolomé, Kabasale (5), Elechi (8), Nunes, Lobaco
Levitec Huesca La Magia: Alonso (24), Casanova (10), Urdiain (7), Lafuente (8), Rey. Quinteto inicial. Cabrera (7), Etxeguren (4), Dial, Kumpys (6), Javi García (7).
Parciales: 31-19, 20-15 (descanso 51-34) 26-19, 14-20.
Árbitros: Rial, Carrera, Adán.