El Bada Huesca recibe este sábado (20.00) en el Palacio de los Deportes y a puerta cerrada al Anaitasuna. Primer partido de la pretemporada, dos semanas después de iniciar los entrenos para la incierta 2020/21. Un amistoso para abrochar un día, otro más, de preparación. Antes de jugar contra los de Pamplona habrá doble sesión. Sobre el 40×20 faltará Álvaro del Valle, lesionado en un gemelo, y con una de las incorporaciones, Oleksander Nekrushets, a medio gas. Una anterior lesión en su rodilla izquierda implica que no vaya al mismo ritmo que el resto. Y Nolasco lo deja claro: “Me preocupa”.
Será la primera oportunidad para hacerse una idea de lo que puede ofrecer este Bada. Sigue, por lógica, tierno. La pandemia del coronavirus pasa factura. Demasiados meses sin contacto con la redonda. Ahora toca consolidar la base. La de ataque y la de defensa. Ya se sabe que el resultado de estos partidos importan poco. Bueno, nada. Pero sí que dejan ver cosas. O intuirlas.
De momento hay cierta atmósfera de que será una temporada distinta a la de la anterior campaña. Entonces se arrancó con gente tocada en un grupo con caras nuevas. Hoy, esos ‘nuevos’ han crecido. Ver a Montoya, Asier y Sergio, hoy, es muy distinto al ayer. Hay sensación de más empaque. Y de los nuevos, Janez tiene un brazo con una velocidad enorme. Manda obuses a la portería contraria. Con Joao Pinto, debe haber gol.
Tras el amistoso de este sábado a puerta cerrada por el coronavirus llegará -o no- el del miércoles en la ciudad barcelonesa de Granollers. El equipo está expectante ante ese segundo amistoso. Y sobre el Bada Anaitasuna de este sábado, Nolasco subraya las dos premisas: “Quiero ver cosas positivas y que no se lesione nadie”.