Hoy Sergio Samitier ha dado un salto de calidad. Más bien lo ha dado durante todas esta semana. Lo digo porque tras cinco exigentes días acaba de enfundarse el maillot de la montaña en el Tour de los Alpes. La general de esta clasificación descansará este año en Barbastro. Y lo hará con todo merecimiento. Cinco días que apenas le han permitido relax al aragonés, ya que para conseguirlo ha tenido que luchar su hueco en las fugas. Sólo así podía asegurarse el sumar los puntos necesarios para vestir de verde oscuro al final de cada jornada. Y así hasta el último día, hasta el último puerto.
No ha estado sólo. Sus compañeros del Euskadi-Murias trabajaban, a parte de para la etapa, también para él. Llevarse una clasificación ante varios World Tour siempre es goloso para un equipo de segunda con aspiraciones de primera. Uno de los que ayudó lo suyo fué Fernando Barceló. El de Huesca siempre estuvo atento en favor de su paisano, a su lado, o en fugas para junto a otros compañeros quitar puntos a los rivales de Sami.
Para el recuerdo de Samitier quedará su paso en cabeza por el techo de esta edición. El Monte Giovo (2.094 metros) vio, entre frío, niebla y nieve como el altoaragonés lo coronaba en primera posición. Ya había hecho lo propio en el pequeño Tulfes de tercera. Y todo en una cabalgada de 156 kilómetros que no llegó a buen puerto por decisión y estrategia del todopoderoso Sky. Todo esto pasó en la segunda etapa. El día que debería hacer creer a Sami en sus posibilidades, en las del gran ciclista que lleva dentro.
Tour de los Alpes
Esta pequeña pero espectacular vuelta tuvo un joven vencedor. Hablamos de Pavel Sivakov, el ruso del Sky que arrasaba en sub 23 como pocos lo han hecho. 21 años y ha demostrado fuerza y madurez a partes iguales. Y eso que ganarle a Nibali en Italia no es fácil. El siciliano acabó tercero, ya que Sky logró colar a otro de sus cachorros en el podium, el británico Tao Geoghegan Hart. Y ya sabéis, Samitier primero en la montaña.