Los Espacios Nórdicos de Aragón (ENA) han decidido aunar esfuerzos y de la mano de los ayuntamientos claman por asentar unas bases para reivindicarse con el objetivo de que el Gobierno de Aragón ayude en aspectos legislativos y la mejor gestión de los recursos disponibles.
Es la otra nieve. La que vive de forma paralela a la del esquí alpino. Sin tanta tinta, imágenes, menos minutos de radio y visibilidad en las redes sociales. Y es mucho más que el esquí de fondo. Son espacios nórdicos donde tienen cabida muchos deportes relacionados con la nieve. Sí, el fondo es el más conocido. Pero también hay otras actividades. Excursiones con raquetas, back-country, actividades con trineos conforman el abanico de deportes que cada vez gana más adeptos. Esta temporada , aún sin terminar, un 15% más de usuarios que respecto a la anterior. Y los espacios nórdicos, gestionados en Aragón la mayor parte de los mismos por sociedades privadas, sobre dominios públicos, proponen un salto sencillo y de calidad.
El salón de actos de la Diputación de Huesca ha sido esta mañana el escenario elegido donde gestores privados y representantes de ayuntamientos se han sentado alrededor de la misma mesa para hacer una puesta en común sobre sus necesidades. Mario García, presidente de ENA, contextualizó las demandas de esta asociación que lleva ya 6 años trabajando en la promoción y desarrollo de estas áreas deportivas de montaña. “Tenemos planes de dinamización y lo que queremos es que el Gobierno de Aragón ayude con la legislación de estos espacios, con la mejora de los accesos, señaló. Y rechazó de plano que sus demandas tengan que ver con la demanda de dinero. “Lo que queremos es que se gestionen bien los recursos. Que si una quitanieves tiene que limpiar el último tramo de una carretera, sea de quien sea la propiedad, lo haga o que una estación de esquí alpino nos ayude con el material que tiene”.
El alcalde de Hecho, Luis Gutiérrez, puso el acento en la cuestión que atañe a la vertebración del territorio ya que se trata de espacios dinamizadores del territorio ubicados la mayor parte de los mismos es espacios protegidos. Los Espacios Nórdicos de Aragón reciben cerca de 35.000 usuarios cada temporada y llegan a generar 50 empleos directos. Sólo en Llanos trabajan 35 personas, aunque generan muchos más puestos de trabajo de empresas anexas como son las escuelas de esquí o los guías de mushing que depende directamente de la nieve, entre otros muchos.
Unos datos a los que también podrían llegar el resto de espacios con un poco más de apoyo como el que están reivindicando. Además, la revalorización de estas estaciones supondría tener turismo de invierno con hoteles y casas rurales en zonas que en estos momentos sólo abren en temporada estival. Y es que estos espacios representan la única oferta de nieve en muchas de las zonas donde se ubican, y su puesta en valor supondría el crecimiento tanto turístico como económico de los pueblos y comarcas que los albergan.
