René Román se ha convertido en la última decepción del Real Zaragoza. Su fichaje era ya un hecho. Tanto que se le había buscado salida a Ratón en forma de cesión al Nàstic de Tarragona. Un movimiento que sorprendió, sobre todo para ser el primero del mercado de invierno, ya que la portería no es ni mucho menos una de las prioridades más urgentes del conjunto maño.
Torrecilla cerró un acuerdo con René, de 37 años, que llegaba libre tras rescindir su contrato con el Dinamo de Bucarest. El guardameta aterrizaba para ser suplente de Cristian Álvarez, lo que dejaba a Ratón sin sitio en el equipo. El movimiento era inesperado, pero más inesperado aún fue que René Román no pasase el reconocimiento médico con el Real Zaragoza.
Ello rompió toda la operación, tanto la llegada de René como la salida de Ratón. Una incorporación decepcionante, pero no ha sido la única en la historia del Real Zaragoza. Repasamos algunos de los fichajes más decepcionantes de la historia blanquilla.
Etinof, el más reciente
No hace falta irnos muy lejos para empezar a recordar fichajes frustrados de la dirección deportiva del Real Zaragoza. Lalo Arantegui incorporó a Etinof, llegándose a hacer oficial por parte del club. Etinof se hizo la foto de rigor junto a Arantegui y se llegó a convocar a los medios para su presentación. Sin embargo, el jugador no pasó reconocimiento médico y el acuerdo con el extremo quedó roto.
El ex director deportivo del Real Zaragoza fichó, en esta misma etapa, a Bikoro y Mingotes. Tres fichajes que se anunciaron prácticamente a la vez y a cuál más decepcionante. Bikoro sigue cedido en el Numancia, aunque el club soriano quiere romper su vinculación. Mientras, Mingotes está en el Valencia Mestalla.
Nery, futbolista a la fuga
¿Recuerdas a Gustavo Nery? Estuvo en el Real Zaragoza a comienzos de 2007. Llegó en el mercado de invierno pero apenas saltó al césped en 4 partidos. Las expectativas iniciales de su fichaje pronto se diluyeron. Su falta de forma no gustó al por entonces entrenador, Víctor Fernández. No tardaron en llegar las lesiones musculares.
Los problemas fueron a más cuando Nery, directamente, se fugó del Real Zaragoza rumbo a Brasil. El futbolista había solicitado permiso para irse, el club se lo concedió pero, una semana antes de la fecha prevista y tras ver que Víctor no le convocaba para el encuentro de esa jornada, Nery decidió por su cuenta y riesgo adelantar su viaje a Brasil.
Coentrao llevo la camiseta zaragocista… ¡durante 10 minutos!
Sí, 10 minutos. Ese es el tiempo que Coentrao jugó en partido oficial con el Real Zaragoza. Perteneció al club durante seis meses, llegando en el verano de 2008. Disputó la pretemporada pero después su rendimiento y su actitud fueron de mal en peor.
Las salidas nocturnas del jugador eran un secreto a voces. Incluso, en una ocasión, llegó a una sesión de entrenamiento y al ver que era voluntario, abandonó la Ciudad Deportiva y regresó a su domicilio. Marcelino era por entonces el entrenador zaragocista y, dada la falta de compromiso de Coentrao, decidió dejar de contar con él. “Antes dejo el fútbol que volver a Zaragoza”, manifestó Coentrao tiempo después. Al final, el futbolista terminó en el Real Madrid.
Peternac, de estrella a estrellado
No tuvo mala visión el Real Zaragoza al fichar a Peternac. O eso parecía. El futbolista venía de triunfar en el Valladolid. En el club pucelano marcó 55 goles, pero en el Zaragoza disputó únicamente 9 partidos en Liga sin llegar a estrenarse como goleador en la competición doméstica. Sí anotó un tanto en Copa.
Las fiestas y salidas nocturnas también fueron una tónica habitual en la rumorología en torno a Peternac. Se le cedió al Murcia pero al regresar, su rendimiento fue aún peor. Acabó sin ficha y retirándose del mundo del fútbol profesional en 2003.
Drulic, dinero vs. calidad
El dinero no garantiza un buen fichaje. Eso es lo que le ocurrió al Real Zaragoza con Goran Drulic. Solans se gastó en él 2.200 millones de pesetas pero su paso por Zaragoza estuvo repleto de imprevistos desde el día de su llegada. Nada mas aterrizar sufrió una amigdalitis, después se rompió el ligamento cruzado de la rodilla derecha y estuvo prácticamente toda la temporada sin jugar. Llegó a la recta final para certificar el descenso zaragocista.
Se quedó en Segunda, las molestias le impidieron jugar con regularidad y después, con el equipo de nuevo en Primera, no tuvo participación en 2004 cuando el Zaragoza ganó la Copa del Rey y la Supercopa. Se fue en 2005.
Popa, el canterano del Inter que no pudo con Bagnack
Un caso que llama la atención en los últimos años es el de Razvan Popa. Llegó desde el filial del Inter como una joven promesa, pero en su única temporada en Zaragoza apenas tuvo oportunidades. Se le culpó de errores defensivos que no procedían tanto de él, sino de su compañero Bagnack.
Cuando Bagnack tocaba el balón, las risas nerviosas recorrían las gradas de La Romareda. Los aficionados lo veían claro, pero a pesar de ello ni Milla ni Agné, entrenadores zaragocistas en la 2016 – 2017, dieron a Popa una oportunidad. Se acabó marchando cedido al Burgos y después, abandonó el Zaragoza rumbo al fútbol rumano.
Marco Pérez, preludio del fracaso en su presentación
El delantero colombiano Marco Pérez solo estuvo una temporada en el Real Zaragoza. Su paso por el club blanquillo será recordado por la anécdota de su presentación, en la que se cayó al suelo cuando intentaba lucirse con el balón. La imagen siguió teniendo miles de visualizaciones en Youtube años después. Esa caída no pudo ser más que un preludio de lo que estaba por llegar en su rendimiento como futbolista blanquillo.
Para muchos es el peor fichaje de la historia del Real Zaragoza. A pesar de ello, llegó a jugar bastante debido al bajo nivel de la plantilla en la temporada 2010 – 2011. Disputó 18 partidos con un gol. Triste balance para el que llegó como delantero estrella del Real Zaragoza en el verano de 2010.
El Real Zaragoza, el tercer plato para Brehme
El internacional Andrea Brehme llegó al Real Zaragoza en la temporada 1992 – 1993 pero dejó claro desde su presentación que venir al club blanquillo nunca había sido para él una prioridad. “He venido aquí porque no he podido fichar por el Barça ni por el Atlético de Madrid”, afirmó el jugador.
Víctor Fernández ha tenido que afrontar de todo como técnico zaragocista. También fue a él a quien le tocó lidiar con estas palabras de Brehme y con su bajo rendimiento posterior. Se negaba a jugar por la izquierda, como Víctor quería, y se marchaba constantemente a Alemania.
Llegó como estrella pero solo metió 4 goles entre tres competiciones: Liga, Copa y UEFA. Su rendimiento, por tanto, no ayudó a recuperar el cariño de una afición que ya tenía perdido desde el mismo momento de su llegada. No se puede empezar peor.