ZARAGOZA| No hay que ser muy perspicaz para saber que algo ha cambiado en el Real Zaragoza. Tan solo basta con mirar la clasificación de la Liga Hypermotion para notar que algo diferente se ha fraguado en el seno del club. El pleno de victorias y la imbatibilidad en las cuatro primeras jornadas tan solo es un reflejo de las cosas bien hechas a lo largo del mercado estival. Juan Carlos Cordero supo moverse rápido y sobre todo eficazmente para ponerle en bandeja a Escribá una plantilla en la que las opciones y registros son casi infinitos. Cosa que no había pasado ningún año de todos los que lleva el Real Zaragoza en el lodo de la Segunda División.
“Es que hay para hacer dos alineaciones y no se bajaría el nivel”, es la frase que retumba en La Romareda cada día de partido. Y es completamente cierta. Desde la portería hasta la delantera pasando por el banquillo hay mimbres para hacer un equipo ganador. Con un Cristian Álvarez viviendo una segunda juventud y con Jair y Francés en un estado de forma altísimo, el Real Zaragoza ha logrado no encajar ningún gol. Pero aparte de estos tres pilares fundamentales; el mediocampo y la parte de arriba cuenta con futbolistas excelentes que han dado un salto de nivel al equipo en todas las facetas del juego.
De esta forma, Fran Escribá es el máximo responsable de hacer funcionar todas las piezas del engranaje y de momento le está saliendo a las mil maravillas. Con la facilidad para adaptarse a distintos esquemas, el Real Zaragoza es un equipo camaleónico con el que todo entrenador sueña dirigir. El 1-4-4-2 en línea o en rombo son las variables con las que está jugando Escribá. Las dos primeras jornadas parecía inamovible el centro del campo con Marc Aguado, Francho Serrano, Toni Moya y Maikel Mesa. Pero a partir del descanso frente al Tenerife, se probó a jugar con extremos. Bermejo y Valera dieron otro aire al equipo y se acabó ganando. El pasado domingo, el propio Valera sustituyó a Toni Moya en el once inicial y cuajó 60 minutos a un excelso nivel. Lo que significa que esta plantilla se puede adaptar a cualquier situación y el rendimiento va ser siempre positivo.
Un banquillo de alto nivel
El grado de diferencia es abismal entre los que salen desde el banquillo en comparación con la temporada pasada. Mollejo, Sergi Enrich, Jaume Grau, Bermejo o Manu Vallejo son algunos de los futbolistas que no han partido desde el inicio en estos primeros cuatro partidos. Nombres que aportan ese plus en los momentos que requiere el encuentro. Cosa que en antaño era difícil de ver. Además, todos entienden su rol y el efecto que provoca eso en la plantilla es excelente para el devenir del equipo. Ahora, Escribá es el encargado de hacer que sus planes salgan bien. Y de momento, lo está consiguiendo.