Luis Alberto Hernando vuelve de la Ultra Pirineu molido tras los 110 kilómetros y 6.800 metros de desnivel positivo en sus piernas y en su cabeza, con ganas de ir poniendo el broche a la temporada, contento por cómo le han tratado a él y a su equipo los organizadores de la carrera y feliz con la Copa del Mundo en su poder… otra vez.
Sigue recopilando trofeos. Cerró los 39 años con la victoria en The Rut y entró en la década de los 40 con la Copa del Mundo de carreras por montaña en su poder. Y no ha sido fácil. Nunca lo es cuando te dedicas al trailrunning y acumulas en tus piernas y en tu cabeza tantos kilómetros y desniveles. Llegó a la Ultra Pirineu fuerte físicamente, pero falto de entrenamiento. Y acertó. La segunda parte de la prueba la pasó mal. Aún así sexto tras cruzar la línea de meta. Fue de más a menos. Compartió muchos kilómetros con Cristofer Clemente e incluso se sintió fuerte hacia el kilómetro 42 cuando iban los dos en cabeza. “Me sentí fuerte, ataqué y me puse en cabeza”, explica Luis. Y hacia el 48 empezó a sufrir. “Lo note más de lo que esperaba. Creía que me iba a sentir mal hacia el final, no tan pronto”, acota Luis Alberto.
Y cuando las piernas no responden como uno quiere hubo que tirar de mentalidad y de amigos, del equipo de apoyo volcado para hacerse de nuevo con las World Series, con la Copa del Mundo. Tiró de oficio y entró sexto en meta de una carrera que ganó el leonés Pablo Villa. La victoria tiene como recompensa más vistosa una camiseta, ni medallas ni copas que poner en alguno de los anaqueles de su casa que debe estar atiborrada de trofeos.
La Ultra Pirineu decidía el campeón de la Copa del Mundo 2017 que consta de 8 pruebas en las que se tienen en cuenta los tres mejores resultados. Y Luis Alberto llegó a la prueba española tras ganar la francesa de High Trail Vanoise y The Rut, en Estados Unidos que tenían un plus de un 20 % de puntuación. Por tanto, el burgalés afincado en Jaca llegó con 240 puntos, mientras que sus máximos rivales para el triunfo fueron el francés Aurelian Dunanz-Pallaz con 193 puntos y el ruso Dmitri Mityaev con 171,6.
Luis Alberto recibió nada más entrar en meta el abrazo de su hijo y de su chica y esta mañana, tras la entrega de premios en la plaza de Gabà (Barcelona) ha celebrado con una comida y parte del equipo, otros marcharon ayer, tanto la Copa del Mundo como la entrada en los 40 ya que cumplió esa edad el pasado viernes. Y un año más, Luis Alberto felicitó a los organizadores de la Ultra Pirineu y la forma en que los aficionados se vuelcan con los runners en esta prueba.
Tras acabar la carrera y con la paliza aún encima, Luis Alberto va a retocar el calendario competitivo. Lo que sí tiene seguro es que va a estar en la DemandaSaurus, que se celebra a mediados del mes de octubre en Burgos, a finales de ese mes correrá en Galicia y junto con Nieves, su chica, va a participar en la Everest Trail Race que se celebra entre del 5 al 17 de noviembre, en el Himalaya de Nepal y específicamente en la zona del Solukhumbu, entre los 2.000 y los 4.100 metros de altitud.