Pasan los años y al igual que todo en este mundo, el fútbol también se encuentra en un constante movimiento originando nuevas situaciones que igual eran inimaginables hace unas temporadas. Hay una gran variedad de ejemplos de las cuales podríamos estar hablando horas y horas; sin embargo, nos centraremos en aquel histórico Barcelona ‘B’ al que tanto se le atragantó el Huesca durante la temporada 2010/11.
Luis Enrique y su equipo técnico. | Foto: www.elobservadordelmundo.comLuis Enrique afronta esta temporada como su primera al frente del FC Barcelona, puesto que se ha ganado a pulso debido a la enorme labor que ha realizado desde el inicio de su carrera como entrenador. Para analizarlo detenidamente, debemos retroceder unos años atrás, tres concretamente, cuando el asturiano se encontraba en su tercer año consecutivo dirigiendo el filial azulgrana y consiguiendo una campaña sobresaliente situando a su equipo entre los puestos más altos de la tabla de la Liga Adelante, cosa que ningún entrenador anterior había logrado, ni siquiera el mismísimo Pep Guardiola, gracias en gran parte al fortín creado en el Mini Estadi.
Sin embargo, en la jornada 9, este fortín sería sorprendentemente destruido por el conjunto oscense con un solitario gol de Gilvan en el minuto 73 que serviría para darles oxígeno al encontrarse rozando los puestos de descenso. No por ello la guerra acabaría ahí, ya que una emocionante batalla se preparaba en la jornada 30 en El Alcoraz.
Llegó el 19 de marzo del 2011, una gran expectación se congregaba en el feudo alto aragonés y no era para menos, un fuerte Barça B con un juego vistoso y efectivo llegaba a Huesca. Entre los componentes de la plantilla, nombres que podían sonar débilmente a los aficionados en aquel momento como Edu Oriol, Bartra, Nolito, Jonathan Dos Santos, Tello o un tal Thiago Alcántara; colaboraban para convertir a su equipo en uno de los más temidos de Segunda División española.
Luis Enrique y Onésimo. | Foto: www.elobservadordelmundo.comEl equipo de Onésimo sin embargo, no demostró ningún tipo de miedo en el partido de vuelta que comenzaba con un golazo de volea de Tariq con el que se adelantaban por 1-0 en el minuto 19. Un gol tempranero podía desembocar en un encuentro tranquilo para el Huesca, pero la calma pareció disiparse en el minuto 40 con la expulsión de Molinero por doble tarjeta amarilla; esto cambió el planteamiento del conjunto aragonés que tuvo que empezar a realizar un juego más defensivo. En la segunda parte, llegaría finalmente el gol del empate por medio de Benja que se quedó solo ante Andrés Fernandez tras un gran pase de Nolito. Aun así, los locales fueron a por la victoria y a punto estuvieron de obtenerla al anularle un gol a Tariq por un inexistente fuera de juego. La SD Huesca se llevaba un punto que sabía a poco después de todo lo demostrado durante el enfrentamiento.
En esa temporada, el Barcelona B quedaría tercero de la Liga Adelante aunque no pudo optar al ascenso debido a que las reglas establecidas no dejan que un equipo principal y su filial se encuentren en la misma competición liguera. Pese a ello, la magnífica campaña de Luis Enrique y sus jugadores no pasó desapercibida. Muchos de aquellos futbolistas nombrados anteriormente han acabado en equipos como Chelsea (Edu Oriol), Celta (Nolito), Bayern de Munich (Thiago) o en el propio Barça en el caso de Bartra o Tello aunque éste se encuentra cedido actualmente en el Oporto. Además, Luis Enrique pondría rumbo a Roma donde no tendría una de sus mejores experiencias, tras su paso por el Celta, el asturiano volvería a la capital catalana pero esta vez, como entrenador del primer equipo.
Muchos futuros ‘jugones’ pisaron el verde del coliseo azulgrana en aquel partido del 2011 del cual Luis Enrique no guarda un grato recuerdo ya que el Huesca fue superior. Después de la decepción del descenso a Segunda División B, la Copa del Rey ha dado un regalo a la afición azulgrana que podrá disfrutar, no de futuros ‘jugones’, si no de estrellas consagradas.