ZARAGOZA | El Real Zaragoza ha anunciado la renovación de Marcos Luna. El canterano extiende su vínculo hasta 2029, en un movimiento estratégico, que premia su evolución de los últimos años y la explosión de su primera vuelta. El anuncio llega en días frenéticos, en los que la venta de Iván Azón al Como parece cada vez más próxima. Capítulo aparte merece la operación del delantero, mientras los rumores se centran también en su relevo, con Álex Forés en la sala de espera. La mañana de reyes será para Luna, que ha mostrado en media temporada que el fútbol está lleno de sorpresas.
Hace siete meses, el futuro de Marcos Luna parecía lejos de La Romareda. La dirección deportiva planeaba una nueva cesión en la que madurar su fútbol y añadir una experiencia similar a la que había vivido en Irún. El tiempo de la pretemporada jugaba en su contra y él, a través de una ética de trabajo ejemplar y silenciosa, fue capaz de cambiar su suerte. Todo empezó con un gol de verano en Tarazona, le siguió un stage en Pinatar y una actuación convincente en Tarragona, a solo unos días de empezar la competición. Víctor Fernández creyó en sus condiciones, en las cualidades físicas de un lateral que tiene algo de purasangre, de atleta y de esprínter.
En media temporada, ha conquistado la banda derecha, hasta desplazar a Iván Calero a un lugar inesperado. Su evolución le ha situado no solo como titular en el Real Zaragoza sino como uno de los mejores laterales de la categoría. Es el lateral con mayor contribución goleadora, el segundo que más ocasiones genera y un futbolista esencial en el último mes de competición. Probablemente el jugador que más ha mejorado en la primera fase de la temporada. Autor de 2 goles y de 2 asistencias, en los últimos encuentros ha cultivado una sociedad especial con Ager Aketxe.
El Zaragoza descubrió hace tiempo un lateral para mil lunas, capaz de secar a Alejandro Balde en un célebre partido de cantera. El de Letux ha logrado hacer suya la banda de La Romareda, con un fútbol constante, atlético, lleno de explosividad y de promesas. En un momento en el que las renovaciones vertebran la actualidad zaragocista, el club se asegura el futuro de un lateral moderno: un jugador que se construye al galope.
Zaragocista desde alevín, el niño “que siempre miraba al Zaragoza”, seguirá en La Romareda hasta 2029.