Las lluvias caídas desde ayer en la capital oscense han puesto de nuevo a prueba el maltrecho sistema de drenaje del coliseo azulgrana.
A pesar de que las lluvias no han sido muy intensas en las últimas horas (9 l/m2 en el día de ayer y 10 l/m2, hoy), el césped de El Alcoraz presentaba numerosos charcos que a las 13:30 horas hacían imposible la práctica del deporte rey.
Una delegación del Real Zaragoza se personaba en Huesca a las 13:00 horas para, junto a los responsables azulgranas y el trío arbitral, inspeccionar el terreno de juego.
Unas horas después, un responsable de LaLiga instaba a la SD Huesca a poner operarios y maquinaria sobre el terreno de juego para que el campo pudiese estar practicable a la hora fijada.
Finalmente el colegiado del encuentro, tras los trabajos realizados por las brigadas azulgranas y el cese de la lluvia, ha decretado que el choque se disputará como estaba previsto. La única incógnita es si el duelo comenzará a las 20:00 horas o se retrasará hasta que el campo presente mejor aspecto.