Este fin de semana dio comienzo oficialmente la nueva temporada de pesca de la trucha bajo la normativa del Plan General de Pesca de Aragón que vio la luz el pasado 14 de febrero.
Se esperaban pocos pescadores en los ríos altoaragoneses en este comienzo de la temporada de la pesca de la trucha y así fue. El sábado, en el Pirineo, hizo un día muy malo con ventisca, nieve y frío. Si a eso se le añade el exceso de caudal en muchos ríos, muchos deportistas optaron por quedarse en casa a la espera de que la situación mejore.
Los cotos sociales han estado este fin de semana de la apertura con muy poca ocupación y en algunos no se ha podido pescar por las malas condiciones del río. El sábado la tónica en la montaña fue la nieve. Este domingo ha salido con nubes y claros y algo de viento que fue en aumento, así como más nubes y chubascos en los valles del Pirineo, y frío que no ayudó tampoco a que la situación mejorara y nuevamente pocos pescadores en todos los escenarios.
En aquellos ríos que están regulados y las condiciones de caudal no han sido tan adversas, en las horas centrales del día y para aquellos pescadores que han aguantado las adversas condiciones meteorológicas, han conseguido alguna captura. Pero en general el inicio de esta campaña ha sido muy malo. Ya no es lo que era y no se llenan los cotos sociales ni para la apertura.