La alero barcelonesa Marta Montoliu era una de las más destacadas del Mann Filter Zaragoza en la victoria del equipo en Bembibre del pasado domingo. La ‘7’ convertía 12 puntos, todos ellos en el tercer cuarto, con 4/6 en sus lanzamientos, capturaba 5 rebotes y daba 3 asistencias. Hemos hablado con ella para valorar cómo se encuentra el equipo y hablar de su recorrido en el mundo del deporte.
¿Cómo está el equipo tras la victoria del domingo en Bembibre?
Sienta muy bien ganar después de estos dos partidos duros con los que hemos empezado la liga –Girona e IDK Guipúzcoa-. El viaje de vuelta después de una victoria es mucho mejor, y más si es largo, que la noche del domingo al lunes llegamos aquí a las cuatro y media de la mañana.
Tuviste un papel fundamental con 12 puntos en el tercer cuarto…
Estoy con más confianza y cuando tengo más protagonismo a la hora de jugar bloqueos directos y tocar balón para leer el juego, creo que puedo aportar bastante en esa faceta. Es lo que me gusta y me siento mucho más cómoda.
Otra buena noticia que nos dejó el partido es el debut de Quinn Dornstauder tras su larga lesión de rodilla. ¿Cómo se encuentra?
Estamos tratando de ayudarla entre todas, estamos con ella y tiene que tener la confianza y sentirse importante. Realmente Quinn es importante para el equipo, necesitamos una jugadora de sus características. Esperamos que poco a poco se le vaya el miedo que tiene. De hecho, el domingo ya la vimos tirarse al suelo a por un balón y nos quedamos todas ‘uaoo’. Está mejor físicamente y demuestra que ya no está pensando en la lesión. Queremos que vuelva a ser la Quinn del año pasado, que varias veces estaba entre las más valoradas de la jornada.
Y este domingo por fin podrás estrenarte en el pabellón Eduardo Lastrada del Stadium Casablanca…
¡Sí! Estoy con muchas ganas de jugar aquí tras tantos viajes. Todas notamos que la afición está ahí, ¡el apoyo de la gente a través de Twitter es increíble, estoy alucinando! En La Seu la gente no estaba tan conectada a las redes sociales. Aquí la gente nos ayuda, nos da su apoyo… nos sentimos arropadas por el público. Se ha montado un grupo de animación, la Fiebre Amarilla, ¡que seguro nos ayudará a sacar más fuerzas!
Esto es increíble, estoy alucinando con el apoyo que recibimos a través de las redes sociales
El equipo perdía en verano a la columna vertebral de la pasada temporada, formada por Ocete, Ferrari, Barbee, Abalde y Luci, a parte del técnico Víctor Lapeña. ¿Ha sido complicado engrasar la maquinaria con tantos cambios?
Venimos muchas jugadoras de diferentes sitios y cada una está acostumbrada a jugar a lo que quisiera su entrenador. Pero esto consiste en trabajar, ponernos al día, conocernos y saber a lo que quiere jugar Fabián. Todas somos muy trabajadoras y a partir de ahí nos toca ponernos en marcha.
¿Por qué decidiste apostar por el proyecto de Mann Filter Casablanca?
Buscaba un nuevo reto, a veces la cabeza necesita salir de la zona de confort. Ya sabía que la temporada 2017/18 sería mi último año en La Seu. Zaragoza me ofreció la oportunidad de poder seguir creciendo y con un buen entrenador como es Fabián.
¿Cómo fueron tus inicios en el deporte?
Realmente mi deporte favorito es el fútbol, toda la vida he querido jugar a fútbol. De hecho, en el patio del colegio yo quería jugar a fútbol, y de pequeña jugaba a tenis, que también me gusta mucho. En esa época no había muchos equipos femeninos, y mis padres me dijeron que montaban un equipo de baloncesto en el cole con mis amigas, así que me apunté en tercero de Primaria. Iba combinando el tenis con el básquet, hasta que llegó un momento en el que no podía compaginarlo porque me coincidían los partidos.
Toda mi vida he querido jugar a fútbol, pero no había muchos equipos femeninos. Me apunte con mis amigas del cole a básquet en tercero de Primaria
Pues ahora lo que compaginas es el baloncesto profesional con el Máster en Profesorado de Secundaria…
Ahora mismo estaba haciendo trabajos, al ser a distancia me da bastante libertad. Sí que hay varios trabajos en grupos y eso es más complicado para cuadrar horarios con los compañeros. Al final todo se trata de organizarse bien. Los días libres como hoy –por ayer- trato de avanzar todo lo que puedo. Además, las clases suelen ser de ocho de la tarde a diez, a esas horas ya no entrenamos, por lo que puedo verlas.
