ZARAGOZA | El Casademont ya tiene nuevos coordinadores tanto para el equipo masculino como el femenino. Tras la marcha de Santi Pérez, excoordinador de ambas canteras, Matías Lescano se ocupará de la cantera masculina, mientras que Carlos Iglesias coordinará la femenina.
Por un lado, Lescano regresa a Basket Zaragoza en el momento perfecto de su trayectoria como formador. Tras 7 temporadas, dos ascensos y un MVP de la Copa Príncipe conquistada en la temporada 2003/04, Matías volvió a su Argentina natal para jugar en Atenas y San Martín de Corrientes. En 2018 retornó a Zaragoza y, desde entonces, se ha estado formando como entrenador.
Por otro lado, Carlos Iglesias afronta su tercera etapa en el club. Dirigió al primer equipo femenino en el momento más delicado de la sección y acabó consiguiendo el objetivo, cimentando la base sobre la que se construyó el éxito posterior y terminando con Gatling de MVP. Después, siguió contribuyendo al crecimiento de nuestros deportistas más jóvenes, como entrenador de cantera y ahora, afronta la coordinación de la cantera femenina.
Una vez conocida la noticia, el Casademont ha acompañado el comunicado con declaraciones de los nuevos coordinadores. Lescano agradecía a Reynaldo y a José Artigas la oportunidad dada: “Tengo mucha ilusión por comenzar esta etapa que siento que llega en el mejor momento. Muy contento porque se dio de la mejor manera: sencilla, natural, sin forzar nada”, ha matizado Lescano, que ha añadido que “se que tengo por delante un reto y una responsabilidad muy grande que es, ni más ni menos, que estar al cargo de la coordinación de la cantera masculina del club insignia de Aragón, pero como siempre lo haré entregándome al 110%”.
Por otro lado, Iglesias ha recalcado que “Volver a la cantera, en este puesto que difiere de lo que es ser puramente entrenador, supone un reto, pero volver a mi casa, que es Basket Zaragoza para mí lo es, supone una ilusión tremenda”. Antes de concluir, el coordinador de la cantera femenina ha remarcado que “tengo mucha ilusión y ganas para afrontar una responsabilidad que, con la dimensión que ha cogido el baloncesto femenino, todo es aún más relevante”.