Ambos futbolistas se han convertido en las piezas fundamentales no solo del centro del campo del Huesca, sino de todo el equipo de Anquela..
El centro del campo de la Sociedad Deportiva Huesca tiene nombres y apellidos, a pesar de alguna incorporación positiva en este último mercado invernal. Tanto Aguilera como Melero son indiscutibles para el técnico jienense y es que su enorme trabajo se ve reflejado en cada partido -en mayor o menor medida- disputado.
A medida que pasaba la presente temporada, Juan y Gonzalo se han afianzado cada vez más en la medular oscense, dotando de equilibrio y calidad al equipo, algo fundamental para que Anquela tenga confianza en dichos hombres. A pesar de los malos momentos atravesados por el conjunto oscense, el entrenador andaluz apostó por ellos sin ningún pudor, mirando siempre por el bien del equipo.
Los datos los avalan, y es que Melero (20 partidos) y Aguilera (18 partidos) son los jugadores que más balones recuperan del equipo (Aguilera lleva 124 y Melero lleva 116), un hecho por el que el Huesca respira tranquilo sabiendo que posee a dos hombres de confianza en una de las parcelas más determinantes de este deporte: la medular.
Con ello surge una cuestión conveniente de analizar: últimamente Anquela había apostado por ese 5-3-2 con el fin de compactar al equipo en tareas defensivas y blindar su propia área. En dicho esquema entraba el nombre de Lluís Sastre acompañando a la pareja Melero y Aguilera, por lo que estos ya no estaban solos en el mediocampo.
La duda ahora está en si la vuelta a ese 4-2-3-1 tan característico de Anquela a principio de temporada será tan positivo como lo fue antes, ya que tanto Juan como Gonzalo se encuentran en uno de los mejores momentos de la competición, con capacidad de dotar al equipo de frescura y equilibrio.