En el día que se ha confirmado el acuerdo preferencial que el Villarreal ostenta sobre él, Melero ha explicado cómo se forjó la operación tras el vespertino entrenamiento del equipo azulgrana: “Desde antes de que comenzara la liga, ya estaba todo resuelto a falta del anuncio”. La opción preferente de compra adquirida por el Submarino Amarillo se adapta perfectamente a las expectativas personales del jugador, que ve como “se ha cumplido mi deseo. Tenía y tengo muchísimas ganas de pasar este año aquí, con mis compañeros y con el club que me ha permitido firmar un acuerdo con un club de una entidad enorme”. “Mi deseo era estar aquí un año más, por el cariño que le tengo al club, defender la categoría que conseguimos el año pasado y por eso estoy muy contento de seguir”, continuaba.
Ya con la vista en la presente temporada, el capitán del Huesca ha hecho un llamamiento a la calma tirando de hemeroteca, puesto que “el año pasado también costó empezar“. “Llevamos un mes de competición, cuatro partidos. Queda mucho por perfilar pero el equipo está con muchas ganas y poco a poco vamos a ir a mejor. A mí me ha pasado otros años. La plantilla es corta, por lo que todos vamos a tener momentos para ayudar a lograr el objetivo”, añadía.
En cuanto al estilo de Leo Franco y su posición en el sistema del argentino, ha confesado que “me da igual lo que el míster me pida. Para defender -refiriéndose al esquema- es más cómodo para mí. Intentaré hacerlo lo mejor posible en el sistema, intentará llegar más a portería y aportar lo más que pueda”. Una nueva ocasión, el próximo viernes, de nuevo en casa y ante la Real Sociedad. El ‘8’ azulgrana ha reiterado la “ilusión de ganar aquí en casa” mientras trataba de transmitir calma, asumiendo que “este año vamos a perder más partidos que el año pasado. No podemos estar con necesidades desde la jornada cuatro ni venirnos abajo por un mal resultado”.
Melero aprovechó para hacer un breve análisis del encuentro que se avecina: “La Real tiene “jugadores de un nivel muy alto, pero creo que tienen claro también que queremos hacernos fuertes en casa y vamos a apretar muchísimo, no queremos que tengan un partido cómodo”. “Es un equipo que trata peor la pelota que el Rayo, le gusta replegarse y salir a la contra. Espero que seamos capaces de jugar en campo contrario y que, a diferencia del fin de semana, nos entren. La semana pasada teníamos mucha ilusión, pero las cosas no salieron como queríamos, pero seguro que El Alcoraz vuelve a estar ahí el viernes y esperemos que con su ayuda seamos capaces de lograr la primera victoria aquí”, concluía.