La SD Huesca ha conseguido ante Las Palmas su segunda victoria consecutiva y duerme en ascenso directo a Primera. Sin embargo, las declaraciones y el tono de Míchel evidenciaban que tanto el técnico como el vestuario están afectados por la lesión de Cheick Doukouré. El jugador tenía que retirarse en los primeros minutos de juego por lo que parece ser una rotura del tendón de Aquiles de su pierna izquierda.
«Es una persona muy importante dentro del vestuario, nos han dado una noticia de una lesión grave y hay que darle mucho ánimo. Esta victoria va por él y ojalá podamos luchar por el ascenso y poder dedicárselo», dijo Míchel.
Al margen de la lesión del centrocampista, el análisis del técnico diferenciaba entre un Huesca superior a Las Palmas en la primera parte y otro que ha sabido «sufrir como equipo» en la segunda para poder llevarse la victoria. Míchel ha repetido la consigna de que «cada partido es una final», dando más valor a tres puntos conseguidos contra un equipo que llevaba cinco partidos sin perder.
El preparador madrileño ha resaltado el gran nivel general del equipo, poniendo el foco en cuestiones como la concentración de los últimos minutos o la presión tras pérdida. En definitiva, puntos para elogiar la buena actuación de sus jugadores. «Este es el Huesca que yo quiero», afirmaba.
El camino de la regularidad
El triunfo de la SD Huesca sobre Las Palmas supone la segunda victoria consecutiva del cuadro de Míchel. Es la primera vez que ocurre después del parón y ha servido a los suyos para reengancharse al ascenso directo. Sin embargo, el ‘míster’ azulgrana cree que su equipo nunca ha salido de esta regularidad.
Uno de los factores que les ha llevado a mantenerse arriba fue, antes del parón, el ‘Factor Alcoraz’. Desde que se juega sin público han tenido que pasar tres choques en casa para ver al Huesca ganar como local. «El equipo no compite con ese extra del apoyo que hemos tenido siempre», indicaba.
El Huesca duerme en ascenso directo
La victoria del Huesca ante Las Palmas supone entrar, al menos por el momento, en ascenso directo. Para Míchel, la lucha por el ascenso no va tanto de cifras y puestos en la tabla, sino de sensaciones. Su equipo depende, por ahora, de lo que haga el Real Zaragoza frente al Girona, aunque tampoco da importancia al choque de Montilivi. «Tenemos que estar preparados para que cada jornada puedas estar en la pelea», manifestaba.