A Míchel le gustó el Huesca que jugó contra el Valencia y le supo a poco el empate conseguido. Subrayó el entrenador que su equipo mereció los tres puntos en juego. Habló en la previa del encuentro de la seguridad de que su equipo iba a competir y que tenía que cortar las transiciones del rival. La realidad es que desactivó al Valencia, que el Huesca dejó una buena impronta y que este es el camino que le gusta recorrer.
Alabó el conjunto de sus jugadores, pero también particularizó en el trabajo realizó por Seoane y Mosquera. “Hemos tenido más llegadas que ellos, hemos corrido más que ellos y no hemos concedido transiciones”, recalcó en rueda de prensa el entrenador del Huesca tras el encuentro. Como epítome: “Hemos hecho un gran partido ante un gran rival”.
El Huesca sigue pendiente de apuntalar el equipo. Míchel, como todos los entrenadores hubiera querido tener la plantilla cerrada antes de empezar la competición, pero el mercado es el que es y estos tiempos son los que son. Lo que desea es que quien venga “cojan pronto su mejor versión”.
El punto conseguido contra el Valencia casi no se va a poder saborear ya que el miércoles recibe en El Alcoraz al Atlético de Madrid con las dudas de Maffeo y Rico de los que dijo Míchel que “miraremos el día a día” para ver si llegan y reconoció de forma abierta que nada sabe sobre Gastón Silva, pendiente de un trámite burocrático para poder jugar.