A escasas horas de que finalice la pretemporada de la SD Huesca en Benasque, Míchel atendió a los medios de prensa para hacer balance sobre la misma. La estancia en la localidad pirenaica ha resultado “muy buena, sobre todo por la actitud de los jugadores y la sensación que tenemos desde el cuerpo técnico”.
El enclave pirenaico ha ayudado a “tomar otros tipos de actividad que te saque de la rutina”. Los jugadores, que tuvieron sesiones de rafting y de gymcanas, han “acogido muy bien las actividades”. En cuanto al trabajo realizado, “el nivel de las cargas ha sido muy alto. La bajada de nivel, si la haces con una actividad que encima involucra al colectivo y es grupal, es positiva“, expresó.
Michel alabó a los jugadores presentes
Tuvo palabras tanto para los jugadores que están como para los que faltan por venir. Sobre los que han realizado la pretemporada, aseguró que todos “son esponjas a la hora de entender la idea que queremos y la llevan a cabo”. Los elogios hacia la plantilla actual se sucedieron de manera sincera por un técnico que se considera “privilegiado por los jugadores que tenemos, el ambiente es espectacular“.
Siguiendo con los presentes, reiteró varias veces el concepto de ‘equipo’, el cual los jugadores “saben de que va, su significado y nos damos cuenta de que en el día a día ellos saben tirar del carro“.
Una llamada de atención a la dirección deportiva
Aunque lo dijo desde el punto de vista del que se lo toma “bien, desde la paciencia, porque veo que están trabajando“, las palabras de Míchel dejaron entrever claramente su descontento con el tema de los fichajes. El entrenador azulgrana fue contundente: “La realidad es que necesitamos más competencia dentro de la plantilla, necesitamos que se incorporen lo antes posible porque a partir de ahora son tres semanas hasta competir. Evidentemente no estamos satisfechos con el tiempo que falta para que llegue un número amplio de jugadores”, aseguró el técnico del Huesca.
Luego rebajaría el tono crítico de sus palabras diciendo que tiene “la paciencia y la seguridad de que van a venir los que queremos que vengan. No cualquier jugador puede venir al Huesca, tiene que tener unas características que nosotros hemos pedido al club y estamos en camino de que puedan llegar”. Sin embargo, volvió a dejar claro al club que “necesitamos con urgencia que vayan llegando”.
En cuanto a qué es lo que necesita, recalcó que “evidentemente necesitamos 2/3 jugadores en la posición de central y en la delantera, donde solo tenemos a Escriche”. Esas son las posiciones que el cuerpo técnico “necesitamos con urgencia, para traer ya”, reiteró.
Más allá, cabe la posibilidad de que “en la portería venga algo. Para el medio del campo también”, aunque parece que este se cerrará con la llegada de Seoane. Por último, “el mercado luego te puede dar la oportunidad de traer un jugador diferente”, posibilidad que pareció convencer al entrenador madrileño si ocurría.
El juego, su mayor éxito
A la hora de hablar sobre cómo ha acogido su idea de juego el Huesca, Míchel sacó pecho. “Hemos trabajado muchos conceptos y el jugador lo ha ido asimilando perfectamente. Las pretemporadas sirven para ir cogiendo ideas, inculcar el estilo que queremos implantar y conocer al jugador”.
Estas ideas de las que habla las explicó en cómo convertirse en un “equipo protagonista, activo y no reactivo. Queremos buscar portería contraria y robar balón lo más rápido posible. Es en lo que más estamos haciendo incapié ahora mismo”. A la plantilla le gusta lo que el cuerpo técnico les propone y “van al 100% por el mismo camino”. En el partido ante el Ejea se vio una mejora amplia en todos los aspectos. A los jugadores se les puso un vídeo en le que se mostraban “pequeñas mejoras que se querían hacer”, como “las ayudas en lineas de pase, el dominio del juego de posición o estar escalonados para dar profundidad en el juego”.
El resultado, tanto del choque como de la pretemporada, dejó al míster “muy satisfecho, no puedo ponerle ningún pero a ningún jugador. Estoy muy satisfecho con la actitud, el rendimiento y la intensidad de todos, cosa que no es fácil cuando el grupo es más reducido de lo que esperábamos“.