El Alcoraz volvía a celebrar un partido de la categoría de oro del fútbol español dieciséis meses después. La SD Huesca ha caído derrotada ante un Cádiz muy cómodo durante los 90 minutos, que aprovechó el error inicial de Andrés Fernández para adelantarse en el marcador. Míchel tras el Huesca – Cádiz ha admitido que los gaditanos han sido superiores y han impuesto su juego: “Nos han cerrado todas las líneas de pase porque la circulación del balón no era todo lo rápida que queríamos y no hemos podido generar la superioridad por bandas”.
Los azulgranas se han encontrado incapaces de crear peligro durante todo el partido, gran culpa la tiene la defensa amarilla. El técnico ha indicado que el “0-1 les ha reforzado más en su trabajo defensivo, ya que hemos tenido mucho balón pero hemos generado muy poco. Su estilo se ha impuesto al nuestro”.
También ha querido entonar el mea culpa tras la incapacidad de crear peligro en la segunda mitad. “Podíamos haber cambiado a jugar más directos en la segunda parte y a ganar duelos, pero no lo quería hacer así porque veníamos trabajando de otra forma. Quizás me haya equivocado en no ser más directos“, ha dicho Míchel.
Triple cambio sin incidencia
Además, hoy con el marcador adverso, el técnico ha realizado un triple cambio en busca de agitar el ataque del Huesca. Unas sustituciones con las que buscaba abrir más el campo, ya que Rafa Mir tendía a ir al centro. “Necesitábamos abrir el campo mucho más y por dentro queríamos aumentar el ritmo de juego con Borja y Sergio que tienen una mayor dinámica en el pase”, ha declarado Míchel.
En un fin de semana marcado por las bajas de última hora, el vallecano ha comentado que han echado de menos a Mikel, pero sabe que “estas circunstancias las vamos que tener que afrontar durante toda la temporada”. A pesar de la derrota frente a un recién ascendido, Míchel considera que no sabe si el Cádiz será un rival directo del Huesca o no, e indica que tienen que ver “como podemos ser más competitivos siguiendo siempre nuestra idea de juego“.