ZARAGOZA | Después de 7 jornadas y en la cuarta posición, el Real Zaragoza tan solo ha encajado 4 goles y gran parte de culpa la tienen los defensas centrales y el portero. Obviando la increíble e incluso milagrosa redención de Poussin, Bernardo Vital y Lluís López han rendido a un nivel sorprendente. Eso sí, el segundo bastante influenciado por el primero. El central portugués ha caído de pie en Zaragoza y su dominio total de las facetas de un defensa han tapado toda las carencias que su compañero podía llegar a mostrar. El sábado pasado en Gijón, el catalán decidió auto expulsarse -en una acción impropia de lo que debe ser un capitán- y es por eso que le ha llegado el momento a Sebastian Kosa.
El central eslovaco ya disputó algo más de diez minutos en la derrota frente al Burgos. Aquel día sustituyó a Marc Aguado para conformar una defensa de cinco junto a Lluís y Vital. El contexto con el que salió al terreno de juego no era nada favorable. Con 0-0 y todo por decidir, vio la cartulina amarilla. Fueron sus primeras huellas como zaragocista en las que no se pudo sacar nada en claro sobre su rendimiento futbolístico.
Con la sanción del ex del Espanyol, es el turno de Sebastian Kosa. Joven y prometedor, renunció a ir con su selección para seguir adaptándose a la ciudad y a sus compañeros. Un hecho que va mucho más allá del fútbol y que demuestra su total ambición y compromiso con el Real Zaragoza. Esto coge aún más importancia cuando la negativa a ir con Eslovaquia vino en el período en el que la parte defensiva era inamovible por los resultados que el equipo de Víctor Fernández venía cosechando.
Una trayectoria rápida y ascendente
Nacido en el 2003 y con 1,91 metros de estatura, Kosa es una promesa del fútbol europeo que ha sido seguido de cerca por grandes clubes en este último año. Con su anterior equipo, el Spartak Trnava de la Primera División eslovaca, disputó 90 partidos siendo titular desde los 18 años. Su veloz crecimiento a nivel de club le hizo debutar con la selección absoluta en un amistoso frente a Austria y fue convocado a la Eurocopa de este verano en Alemania.
Ahora, ha llegado su oportunidad a las órdenes de Víctor Fernández. El eslovaco sabe que tiene ante sí la posibilidad de asentarse en el once y demostrar su talento en una liga importante.