A la Sociedad Deportiva Huesca ya se le han escapado varios puntos en los últimos compases del encuentro en lo poco que llevamos de temporada.
El conjunto azulgrana no acaba de cerrar los partidos y es que podría tener en su haber más puntos de los que realmente posee, ya que apenas lleva dos de los nueve posibles en estas tres primeras jornadas.
En el encuentro contra el Alcorcón, que se saldó con un reparto de puntos, el Huesca gozó de varios mano a mano ante el cancerbero alfarero con los que podría haber cerrado el partido y llevarse los tres puntos a la ciudad altoaragonesa.
Frente al Gimnàstic de Tarragona en El Alcoraz el equipo oscense tenía todas las papeletas para hacerse con el encuentro tras el tanto de Samu pero un error defensivo aprovechado por el conjunto tarraconense ponía el empate en el marcador en el minuto noventa. Sin embargo, los de Anquela gozarían de un mano a mano más que Cmiljanic falló desafortunadamente.
El tempranero derbi aragonés parecía que iba a acabar con un punto para cada equipo pero en el minuto 89, Casado, tras otro error defensivo a balón parado del Huesca, daría la victoria asegurando los tres puntos para el Real Zaragoza.
El balón parado, tarea pendiente
El quebradero de cabeza del conjunto de Anquela en estas jornadas ha sido el balón parado, ya que tanto el gol del Nàstic como el del Zaragoza vinieron precedidos de un despiste de la zaga azulgrana que dio lugar a un resquicio de vida para ambos rivales que pudieron acabar la jugada en la portería del Huesca obsequiándolos con puntos en ambos casos, dos que perdería el Huesca contra el equipo catalán y uno más en el derbi aragonés.