La SD Huesca ha sucumbido ante el CD Lugo en un partido de locura. El mal planteamiento inicial de Nacho Ambriz comenzó lastrando al equipo. Una vez más, al inicio del encuentro, el rival vio puerta con facilidad. Aún con todo, los del técnico mexicano supieron reponerse. En primer lugar, Manu Barreiro introdujo el balón en su propia portería. Mientras, poco después, Dani Escriche colocaría el segundo gol azulgrana en el marcador. Sin embargo, el Lugo hizo la machada en la recta final para re-remontar el encuentro y poner el 3-2.
En sala de prensa, Nacho Ambriz no ha titubeado al afirmar que «no estamos nada tranquilos porque lo más difícil era remontar y ya lo habíamos hecho». Considera que «en la segunda parte no tuvimos la pelota como en el final de la primera», hecho que fue determinante para el desenlace del encuentro. De la misma manera, comenta que «estamos cometiendo errores que nos está costando resultados».
«Esperábamos ese juego directo, en el que luego se juntan bien para ganar la segunda jugada”, ha afirmado el técnico al valorar al Lugo. El míster define los primeros 15-20 minutos como «complicados», pues ha sido cuando la peor versión del Huesca ha aparecido. Pese a admitir que «no estuvimos bien», también muestra fe en su idea al afirmar que sabe que el equipo es capaz de revertir la situación.
«Esta situación se va a levantar»
Con esta derrota, ya son tres los encuentros perdidos por los de Ambriz. «Deberé sacar los recursos de la experiencia para animar al equipo», ha deslizado. De la misma manera comentó que «no me queda más que calmarme”. Aunque los números del mexicano no sean los mejores, continua teniendo «mucha ilusión». «Tengo muchas ganas. Ni por tres derrotas consecutiva se me va a acabar la ilusión. Me siento más fuerte. Tengo ganas de trabajar y esta situación se va a levantar», ha dicho.
Respecto a los cambios, el técnico considera que nunca se sabrá qué hubiese pasado si hubiera hecho los cambios antes. «Es el fútbol y son las decisiones que yo tengo que tomar», ha firmado el técnico. Por consiguiente, afirmó que la decisión no ha sido un fallo, sino un hecho que es propio del fútbol.
«No debemos volvernos locos»
De cara al siguiente encuentro, ha comentado que «tenemos que volver a las bases de ante la perdida, presionar; y cuando el adversario sale jugando, presionar». De igual manera, considera fundamental «hacernos sólidos defensivamente». Además, ha hecho balance tras contrastar con los encuentros anteriores: «También cometimos errores pero estaban todos aceptados».
Pese a todo, Ambriz no quiere que salten las alarmas: «No debemos volvemos locos y decir que esto no sirve. Tengo mucha fe en mi trabajo». El técnico considera que ha llegado hace poco tiempo y «es complicado que el jugador comprenda lo que uno plantea en el día a día». Además, ha tratado de ser optimista: «Ni con dos victorias éramos los mejores ni con tres derrotas somos los peores».