Su entrada al campo llegó por una mala noticia: la lesión de Azón. Su salida fue otra carambola desafortunada. Menos de 20 minutos duró el canario en el césped de El Alcoraz. En lo que pudo ser su última comparecencia con el equipo maño. Entró en el 58, por el goleador del partido; y se lesionó en el 76 tras una dura entrada de Insua. La embestida del gallego derribó a Nano Mesa. Una caída aparatosa y un mal apoyo provocaron su lesión. El parte médico arroja una luxación acromioclavicular de grado dos, además de la lesión muscular e inflamación provocadas en la zona al salírsele el hombro hacia arriba.
El paso del delantero de La Laguna por Zaragoza ha sido tan atropellado como esos giros del guion en su última actuación con el escudo del león. Su entrada a los partidos siempre estaba marcada por un arrojo y una entrega innegociables en cada acción. Nano Mesa ha tenido buenos momentos de juego y otros de mayor imprecisión, pero su furia canaria le ha acompañado en todos sus minutos con la camiseta blanquilla. A veces, una trifulca o rifi rafe con algún rival le despertaba. Y se desataba su inspiración y empezaba a acertar los pases y controles que antes no le salían. Otras, era una discusión con el árbitro o una tarjeta amarilla por una protesta, que no se perdía ninguna. Y, de nuevo, aparecía ese chispazo de magia para enchufar a La Romareda, en parte entregada a su desparpajo. Se venía arriba. Como si necesitase encenderse para que llegara su mejor rendimiento. Para buscar ese disfraz de héroe del partido, que no pudo ataviarse con frecuencia. La temporada de Nano Mesa deja dos goles, seis amonestaciones, unos cuantos “uys” (el último en Tenerife), varias lesiones, con una recaída y molestias recurrentes.
Nano Mesa se ha ganado el cariño de la afición del Real Zaragoza por ese carácter indomable. Un jugador entusiasta que no sabe negociar el esfuerzo y se deja la piel en cada jugada. Un guerrero del ‘Ejército de JIM’. Tan capaz de levantar del asiento a la hinchada por su explosividad en carrera como de explotar él mismo en una acción innecesaria. La irregularidad del canario le ha impedido asentarse en el once; los problemas físicos, tener más oportunidades de ganarse el sitio. En ninguna de sus 23 apariciones con la blanquilla ha completado los 90 minutos y no era titular desde Enero. La temporada acaba a final de Mayo pero, lamentablemente, su recuperación se prolongará algún tiempo más.
Me toca volver a vivir la peor cara del fútbol, una lesión. Estaré unas semanas fuera del terreno de juego, pero seguiré ayudando al equipo en todo lo que pueda.
Desconozco si podré volver a jugar esta temporada, pero como siempre digo, lo que no me mata me hace más fuerte. pic.twitter.com/AOM4JVL8YJ
— Nano Mesa (@NanoMesa22) April 19, 2022
De las últimas cuatro, esta es la temporada que menos minutos ha jugado y sólo en el Logroñés marcó menos goles. La cesión con el Cádiz no contempla opción de compra, por lo que esos 18 minutos en Huesca serán los últimos con el Real Zaragoza. Incluso en su despedida el infortunio va a acompañar al tinerfeño, que no podrá decir adiós vestido de corto en La Romareda, escenario de sus mejores momentos con la blanquilla.