Pau Bonastre – Nàsticmania 2.0 | Ya está en marcha la segunda temporada consecutiva del Nàstic de Tarragona en la división de plata. Una campaña en que la afición catalana ha vuelto a depositar mucha ilusión y esperanza en el proyecto de Vicente Moreno. Pero eso sí, cabe recordar de donde viene éste equipo, que hace dos temporadas estaba en Segunda B, y que ahora aún está en proceso de consolidación a la Liga 1|2|3. Jugadores, técnicos y afición tienen que entender que nada va a ser fácil, y que el éxito de la temporada pasada solo sirve para encarar el nuevo año con más confianza.
La vuelta a Segunda División fue de lo más inesperado posible: tercero en la clasificación acariciando el ascenso directo. Todo un éxito por un club recién llegado a Segunda. Ahora el Nastic encara la nueva temporada con bastantes caras nuevas y con dos bajas destacables como son las de Emaná y Naranjo. Eso sí, las incorporaciones en éste verano hacen pensar que el club tarraconense podrá olvidar rápidamente sus grandes dos estrellas de la temporada pasada.
Once fichajes son los que han aterrizado a Tarragona este verano, más Stephane y Carlos que pasan a tener ficha del primer equipo, y sin contar la repetición de la cesión de Madinda, que ya jugaba con el Nastic el curso pasado. A la portería, las nuevas caras son: Saja (Racing Avellaneda) y Dimitrievski (Granada B). Los de Vicente Moreno han reforzado la línea defensiva con: Djetei (US Douala), Kakabadze (Dinamo de Tbilisi) y Lopo (Deportivo). En el medio del campo, ha llegado en el periodo estival Zahibo, del Valencia Mestalla, y Carlos García, que ha subido del segundo equipo. Donde ha habido más movimiento ha sido en la zona ofensiva: José Carlos (Llagostera), Rarshalla (Olimpik Donestk), Maloku (Hadjuk Split), Juan Delgado (Colo-Colo), Ikechukwu Uche (Tigres) y Stephane Emaná (del segundo equipo tarraconense). Todo apunta que el Nastic se ha reforzado muy bien este verano
Por contra, ha habido un total de 15 bajas. Las más destacadas han sido las de Naranjo, Emaná y Aburjania. Los traspasos de Naranjo y Aburjania han ayudado mucho económicamente al club. El caso de Emaná es diferente, ya que al jugador se le acabó contrato, y el Nastic no lo pudo retener por las diferentes ofertas que tenía el camerunés y también por sus exigencias económicas.
El Nàstic empató a dos en la primera jornada de liga en casa ante el Lugo. Tras una primera parte floja de los de Vicente Moreno, perdiendo 0-2 al descanso, el Nàstic creyó en la remontada y acabó consiguiendo un punto en el último minuto. El guion se repite, ya que la temporada pasada, en la primera jornada de liga, los de Tarragona perdían 0-2 contra el Albacete y al final marcaron 2 goles en el descuento. Una bonita coincidencia, que hace creer en un año de éxitos.
El Nàstic cuenta con la baja sensible del portero Manolo Reina, lesionado en la pretemporada y también con la del centrocampista Manolo Martínez, que también sufrió una lesión en uno de los amistosos.