El partido de Vallecas dejó dos equipos muy tocados y muy lejos de la permanencia. El encuentro, marcado por el miedo y los nervios, dejó ocasiones claras, imprecisiones, polémica e incluso lagrimas sobre el terreno de juego. La SD Huesca domirá a 6 puntos de la permanencia, pudiendo ser 9 mañana si Levante y Villarreal ganasen.
Santamaría (7)
Seguro: El guardameta apareció cuando el equipo lo necesitó, haciendo paradas de nivel. Nada pudo hacer ni en el gol anulado al Rayo ni en el tiro al palo, pero no subieron al marcador. Jugó mucho en largo buscando a Enric y Chimy, pero tampoco encontró fortuna por ahí el equipo azulgrana.
Miramón (6’5)
Aceptable: La tarde del aragonés no fue la mejor, pero tampoco hizo excesivas aguas atrás. Colaboró en la salida del esférico e incluso se incorporó al área en alguna ocasión, pero no fue trascendente para el desarrollo del choque.
Etxeita (4)
Superado: Un partido para olvidar del central. Pese a su habitual seguridad, despejó mal, jugó mal en largo, regaló una ocasión que se fue al palo, jugó al límite en el área en dos ocasiones que posteriormente no sancionó el VAR y, para colmo, falló una de las más claras del Huesca ya en el descuento. Raul de Tomás jugó con él como quiso.
Pulido (7)
Infranqueable: Al contrario que Exteita, el zaguero toledano dejó unos muy buenos 45′, en los que jugó seguro por arriba y repartió juego con criterio. Su lesión, fruto de una entrada muy a destiempo de un jugador local, le obligó a quedarse en el banquillo durante la segunda parte.
Galán (7’5) | EL MEJOR
Intratable: Su aportación al encuentro, sobretodo a la faceta ofensiva del mismo, fue notable. Se movió bien, regateó con soltura y genneró peligro y profundidad. En la faceta defensiva supo sufrir, aunque sí tuvo algún fallo puntual de menor relevancia.
Yangel (5)
Progresivo: Su primera parte fue pésima, pero lo mejoró en la segunda. Perdidas de balón, pases sin criterio y poca aportación a nivel defensivo. En la segunda mitad, sin embargo, se aplicó más en la faceta del robo y cuajo unos 45′ aceptables.
Melero (4’5)
Fantasmagórico: Nadie notó su presencia en el campo y los mejores minutos del conjunto oscense llegaron sin él en el campo. Durante los primeros compases del partido le costó mucho entrar en en la dinámica de juego del equipo. Luego no falló, pero tampoco tampoco aportó soluciones en el ataque.
Moi Gómez (5’5)
Sufridor: Con la ausencia de Rivera, tuvo que aplicarse mucho más en labores defensivas y el equipo lo notó a la hora de generar juego. En el juego sin balón supo sufrir e incluso robó el esférico en alguna ocasión, pero tampoco dio para mucho más.
‘Chimy’ Ávila (5’5)
Incoherente: Lo intentó de chilena, de volea, desde lejos y desde cerca. Fue el único que puso en apuros al meta local, pero también desperdició ocasiones valiosas tratando de marcar goles imposibles. Cuando le tocó pasarla, tampoco tomó las decisiones correctas.
Enric Gallego (5’5)
Nervioso: Igual que contra el Celta, a Enric le faltó claridad en los últimos compases. No acertó con los últimos pases ni con el juego que generó, pero sí bajó balones e intentó cosas con madurez.
Ferreiro (5)
Fallón: Se notó su afán por generar juego, pero no tuvo el día ni en los centros, ni en las decisiones, ni en la fortuna. La temporada del Huesca bien se podría resumir en su partido.
Los cambios
Mantovani (7)
Maduro: Fue el jugador que más cordura pareció tener en el campo . No se precipitó, estuvo seguro atrás y sudó para parar a Raul de Tomás, pero lo logró con buenas entradas y experiencia.
‘Cucho’ (6’5)
Luchador: Un Cucho mucho más colaborador en el juego que en otros encuentros aportó al equipo con su salida, pero igual que a todos, le faltó convertir. Su partido fue bastante decente en cuanto a pases, regates y pausa.
NOTA GLOBAL: 5’9