El Nàstic de Tarragona es, junto al Córdoba, el peor local de la categoría en LaLiga 1|2|3. Ambos conjuntos, en 10 partidos ,han sumado tan solo 12 puntos en su estadio.
El equipo de Juan Merino que aún no conoce la derrota en este 2017 -2 empates y una victoria (1-2), la semana pasada en Lugo- es, junto al Córdoba, el peor local de la categoría. Seis fueron las jornadas que le costó al equipo del ya exentrenador Vicente Moreno conseguir la primera victoria en su estadio. Hasta entonces, 5 empates y 1 derrota era el pobre bagaje cosechado por un equipo con objetivos bien diferentes a los que actualmente aspira. En la actualidad el conjunto grana cuenta con 2 victorias, 6 empates y 2 derrotas en su estadio para un pobre bagaje de 12 puntos.
Los hombres de Merino buscarán reencontrarse con un nuevo triunfo en casa que les separe de la posición de colista que ostentan en la actualidad, empatados a puntos con la UD Almería, ambos con 21 puntos. Para ello deberán doblegar a una SD Huesca a la cual le está costando ganar lejos de su estadio, donde hace 4 meses no consigue una victoria.
Así, el partido se antoja muy importante para ambos. El equipo tarraconense no ha escatimado en refuerzos en este mercado invernal en busca de una salvación que, vista la igualdad reinante, va a estar muy cara; pero si algo tiene claro es que ésta depende de los resultados obtenidos en el Nou Estadi. Las dos victorias consecutivas -ambas por 1-0- ante Getafe y Cádiz allá por el mes de noviembre, hicieron coger moral a un equipo que, pese a ello, volvió a caer de nuevo en casa en la visita del Rayo Vallecano (0-1).
El último equipo en visitar Tarragona fue el Tenerife (1-1), el pasado 8 de enero, en la jornada que abría el nuevo año. Por tanto y tras dos jornadas lejos de su estadio, los hombres de Juan Merino buscaran reencontrarse con un triunfo que les ayude a tomar algo más de aire. La victoria esta misma semana en Lugo (2-3) ha dado moral a una escuadra que necesita sumar de tres en tres si no quiere ver cómo se le complica aún más una temporada ya de por sí complicada.