Nueve meses ha tardado Simone Grippo en recuperarse de la rotura de ligamento cruzado que sufrió en su rodilla derecha. Fue un 28 de noviembre en el encuentro ante el Granada. Las sensaciones desde el primer momento no fueron positivas y poco después, se confirmó que Grippo debería pasar por quirófano. Una lesión complicada y con una larga recuperación por delante.
El mínimo de 6 meses de recuperación que se estipuló en un primer momento hacía pensar que Grippo pudiera empezar a entrenar con el resto de sus compañeros a finales de la temporada pasada. Su recuperación se alargó algo más de lo previsto. Incluso, en los primeros entrenamientos de la actual pretemporada, tuvo que seguir trabajando al margen
Ahora, 9 meses después de aquel fatídico partido ante el Granada, Grippo vuelve a los terrenos de juego. Lo ha hecho ante el Nàstic de Tarragona en el Trofeo de la Ciudad tarraconense que ha ganado el Real Zaragoza. Fue titular y además, lució el brazalete de capitán.
Grippo quiere recuperar la titularidad con el Real Zaragoza
Grippo fue titular indiscutible con el Real Zaragoza hasta que cayó lesionado. En muchas ocasiones formó pareja con Verdasca. Un centro de la zaga que no volveremos a ver ante la inminente salida del portugués. Grippo deberá ganarse de nuevo esa titularidad. Él junto con Guitián, Atienza y Clemente son los cuatro centrales de Víctor Fernández para la próxima temporada. Con Guitián recientemente operado de una apendicitis, Grippo gana enteros para seguir en el once inicial durante los próximos encuentros.
La altura y buena visión de juego de Grippo aportaría seguridad por alto a la defensa blanquilla. Serviría además, para mejorar en la defensa del balón parado que tantos problemas causó al Real Zaragoza durante la temporada pasada. Las similares características de Grippo y Atienza, hacen que uno de los dos deba disputarse la titularidad para acompañar a Guitián. Aunque en esto, serán determinantes las lesiones y la disponibilidad de jugadores.