ZARAGOZA | Fernando López no quiere caretas ni máscaras, tampoco eufemismos ni pomadas. Su discurso en la presentación del tema de la temporada fue cercano, afable y, por encima de todas las cosas, ambicioso. El club debe volver, el Zaragoza es de Primera. Así lo manifestó en una comparecencia simbólica, cargada de emociones, que tuvo un recuerdo especial a la familia de Coke de la Jungla y una banda sonora propia. El Doble Zero ha construido una canción que queda para siempre, que acompañará a los zaragocistas en busca de un sueño recurrente. Zaragoza es ciudad de rap y La Romareda escenario de mitos, el lugar de las leyendas. En ese contexto llega Fernando López, en un momento de pura transformación, en el último año del viejo Municipal, a las puertas de un estadio de este siglo.
El director general pide paciencia y confianza en la formación de un equipo ganador, en el consenso que han mostrado Juan Carlos Cordero y Víctor Fernández. El proyecto sumó ayer un nuevo rostro, con un refuerzo para su carril central: Bernardo Vital. El portugués ha sido el primero en llegar a una zaga incompleta y se le espera en Cádiz, una vez que ya ha completado hoy su primer entrenamiento. El inicio de la competición señala al Zaragoza, con las espadas en todo lo alto y el mercado abierto, en una tónica general del mercado moderno. Con más de diez movimientos en marcha, el fútbol dictará sentencia en el Nuevo Mirandilla, en una cita que será un episodio piloto, un capítulo sin un cierre definitivo.
El mensaje de la propiedad es claro. El Real Zaragoza quiere abordar el ascenso a Primera División. Sin tiempo de espera, sin marcas de agua, con una lectura clara y ambiciosa del panorama. El próximo viernes empieza la liga de plata, cargada de históricos y de equipos que quieren volver a su lugar habitual. En el mismo lugar de la escena está el Real Zaragoza. La diferencia es que esta vez se atreve a decirlo desde el inicio. La meta ya está escrita: Objetivo Primera.