Momento complicado para una SD Huesca que empezó a creérselo con la llegada de Pacheta. El entrenador vivió, desde el primer momento, el club, la ciudad y la provincia y así lo transmitió en cada rueda de prensa y en cada partido. El objetivo no se consiguió, pero el burgalés se mostró lo más orgulloso posible. ¿Continuidad para la nueva aventura en Segunda División? Una incógnita.
“En estos momentos no estoy para pensar. Me duele mucho que la afición haya podido ver a nuestro equipo en Primera División. Nunca se sabe qué hubiese pasado si hubiese llegado antes. Otra cosa supone una utopía. Llegué en un momento muy complicado y ojalá me quieran como quisieron a Míchel“, reflexionaba el técnico azulgrana.
Ha querido aprovechar a la afición, la cual no ha podido disfrutar de su equipo en Primera; al equipo, que ha estado hundido y ha sabido sobreponerse; y, en especial, a Vavro, que “pese a jugarse la Eurocopa, ha querido jugar hoy y lo ha dado todo”.
El Valencia volvió a descender a la SD Huesca, y el Elche arrebató la permanencia a Pacheta, su ex entrenador. Todo ironías de la vida: No ha tenido ninguna influencia el partido del Elche. No tenía ni idea de su resultado hasta los minutos finales. Ni el Elche ni el Huesca hubiese sido culpable del descenso del otro. Les felicito por la temporada, así como a todos aquellos que han logrado sus objetivos”.
Ante todo, el burgalés se ha mostrado orgulloso de los suyos: “Hemos sido unos dignos competidores y me voy a casa con la sensación de que hay muy poco que reclamar a todo este equipo. El final ha sido cruel, pero el camino ha sido apasionante. Hemos aprendido a ganar, a sufrir y a levantarnos. Ha sido una enseñanza continua, hasta el límite“. Al final, no pudo ser. El futuro, de momento, una incógnita. Se vienen unos días muy ajetreados en Huesca.