No les voy a mentir, ni ahora ni nunca por cierto, pero el sábado estuve molesto un rato, así es la cosa. Y es que a mí me enseñaron a vivir el deporte con intensidad, pero a enfriarme pronto para poder opinar y juzgar sin una bufanda puesta al cuello.
Bada Huesca volvió a perder víctima de sus errores, o de no acertar que viene a ser lo mismo. La moneda que lanzabas y salía siempre cara el año pasado, esta temporada cae del lado de la cruz.
Numerosos partidos perdía la pasada temporada Bada Huesca y les daba la vuelta como si nada, como si fuera coser y cantar, y confieso, que tantas veces me taparon a boca los de Nolasco, que mi mosqueo inicial del sábado vino por estar tan mal acostumbrado.
El tropiezo ante Puentegenil parece no ser anecdótico. El equipo tuvo ansiedad en algunos momentos del choque en O Gatañal y perdió varios ataques por precipitación ante la necesidad de dejar de ir a remolque en el marcador. Ojo, que no sólo se falló en ataque: 16 goles en el primer tiempo encajados, creo que hablan por sí solos, y el encajar goles no sólo está en defender bien, sino en saber o poder parar.
Jamás criticaré la actuación de un entrenador porque él sabe mucho más que yo de sus jugadores, pero como nunca me guardo nada en mis opiniones digo, que me habría gustado ver antes a Pablo Hernández bajo palos. De todas formas nadie sabe qué habría pasado con el cambio, pero uno siempre piensa que cuando a alguien no le salen las cosas, un relevo es lo más acertado.
“El equipo debe olvidarse del casillero a cero y dedicarse a lo que sabe”
No todo fue malo en O Gatañal: me gustó mucho Ander Ugarte y creo que nos va a dar más de una alegría en la temporada. El equipo debe olvidarse del cero en el casillero y dedicarse a lo que sabe: juego rápido en ataque y mucha intensidad en defensa. Así se ganaron muchos partidos la pasada campaña y esa es la receta del éxito de los de Nolasco.
Cuenca viene en la misma situación, sin puntuar y a jugar de visitante. El público debe llevar en volandas al equipo porque va a ser un refuerzo muy importante para afrontar el partido. Por si andan despistados, los debutantes Benidorm y Zamora ganaron sus primeros partidos en Asobal.vLos levantinos lo hicieron en la pista de Puentegenil, sí, de Puentegenil, y los segundos a los vecinos del Balonmano Aragón que se tiraron la friolera de 16 minutos sin anotar.
Así que apunten bien esto: con el nombre no se gana.