Cuando uno ha nacido para correr las condiciones son lo de menos. Cuando uno ha nacido para ganar las condiciones también siguen siendo lo de menos. Es lo primero que se me viene a la mente al presenciar la presente y épica edición de la Osan Cross Mountain. Y es que realmente es lo único que se te puede pasar por la cabeza cuando ves a Daniel Osanz en meta. El joven y espigado corredor jacetano ha vencido de nuevo en esta magnífica prueba que abre el calendario del trail pirenaico.
La borrasca que azota la península ibérica ha dejado un recorrido plagado de barro, nieve y niebla. Da igual porque Osanz se mueve en todos los terrenos. Y especialmente cuando pica hacia arriba. Lo demostró en la larga ascensión a Santa Orosia, poniendo un ritmo que le permitió ir abandonando a rivales como Noel Burgos y Miguel Caballero antes de coronar O Zoque. Llegaba lo complicado, una larga y blanca travesía por el nevado puerto de Santa Orosia. Cerca de medio metro de nieve que había sido perfectamente pisado con raquetas. E hilo, centenares de metros de hilo de color para evitar perderse en la boira de Santa Orosia. El descenso fue más para disfrutar y mantener diferencias. Así hasta la meta de Osan. Por detrás Burgos y Caballero a uno y tres minutos respectivamente. En féminas la clara dominadora fue Mónica Sanz.
En meta
El jacetano del equipo Adidas se mostraba contento en meta por “haber conseguido la victoria en una carrera que me gusta mucho y en un día espectacular por las condiciones”. No era un día fácil para la organización, era ponerla a prueba pero para el campeón mundial “se ha hecho un trabajo impresionante pisando la nieve y señalizando todo el recorrido a la perfección”. Mismo comentario que el resto de participantes, organización top. Respecto a la carrera dijo “salir reservando un poco conocedor de la subida a Santa Orosia”, para luego comentar que “de mitad para arriba incrementé el ritmo para sacar ventaja antes del puerto y luego bajar disfrutando y conservando la ventaja”. Vamos, jugando con sus rivales.