“Soñamos en grande y conseguimos lo más grande, mil graaacias”. Este es el entrecomillado de Dani Osanz en su muro de FB para poner en palabras toda la emoción que sujeta un campeonato del mundo de Kilómetro Vertical conseguido el pasado viernes en Italia. La región del Gran Sasso es el escenario del Campeonato del Mundo Júnior y donde el jacetano ha hecho historia. Y quiere más. Ahora va a por otras dos medallas: la de trail y la combinada, la que suma el trail y el KV. Quiere volver a subir al pódium y volver a escuchar el himno desde lo más alto. Volver a escribir en su muro lo que ya dijo tras colgarse la presea de oro al cuello: “Sin palabras, momentos para toda la vida”.
El kilómetro vertical en el Gran Sasso consistió en un recorrido de 3,5 kilómetros con más de 1.000 metros de desnivel en una competición en la que participaron 150 corredores de 18 países. El jacetano hizo una carrera brillante y mantuvo el ritmo constante de principio a fin con muy buenas sensaciones. Consigue la mejor marca de la jornada tras completar la carrera con un tiempo de 36’29 pero dejando imbatido el récord de la prueba establecido hace dos años por Hannes Perkmann (35’46’’).
En declaraciones a sporthuesca.com, Dani Osanz reconoció que “he llegado muy bien de forma a una carrera que había preparado muy bien. Las sensaciones que he tenido durante la carrera también han sido muy buenas para ser un kilómetro muy duro”. Esas buenas sensaciones las alimentó, además, cogiendo a los rivales que habían salido antes –era crono- con lo que “todo me ha salido increíble, todo ha sido perfecto”, señaló. Y esas buenas sensaciones las quiere explotar este domingo en el último día de la cita de los Mundiales Júnior.