HUESCA | Un siete metros le hurtó a Bidasoa el empate contra el Limoges en competición europea y un siete metros le ha dado la victoria ante el Bada Huesca en el partido de ASOBAL. El siete altoaragonés ha caído con la máxima dignidad posible. Sin duda, un tropiezo en su camino hacia la salvación, pero hay una cosa clara: este muerto está muy vivo. Perder así, de una forma tan cruel, pesa. Pero cuando se analice se sacarán más consecuencias positivas que negativas. Y, quizá, también se piense en que todo podía haber sido distinto si el castigo –roja– a Frank Cordiés no hubiera sido tan excesivo podo después de iniciarse el segundo acto. Al final tendrá que llegar la tecnología a la ASOBAL. Las imágenes por televisión no parece que le diera en la cara a Mujica. Ni mucho menos, pero eso es arena de otro costal.
Bidasoa llegó a Huesca enrolado entre partidos europeos, pero sin duda es un gran equipo. Es de esos que saben cómo hay que actuar en cada momento, que no se desesperan ante los fallos, que aparecen sus jugadores con gol -pongamos por caso el exBM Huesca Rodrigo Salinas- cuando más necesario es para su equipo. El Bada sigue en su línea ascendente. Que le dé tiempo a salir del agujero se verá. Todo indica que sí. Siempre que muestre la actitud y el balonmano desplegado contra Cuenca o el de esta noche contra los guipuzcoanos.
La realidad es que este Bada Huesca cuenta con más rotaciones, que puede llegar con ritmo y velocidad de pensamiento con pulsaciones al tramo final. Ser competitivo es básico para firmar otra temporada en la ASOBAl. En la primera parte ha aguantado la presión de Bidasoa que casi siempre ha gobernado con dos a favor, no llegó a tres y se fue al vestuario uno abajo (14-13). Arguillas, bien protegido por su 6:0, sacaba bolas importantes y delante, Parera encabezaba el pelotón contra la portería defendida por Maciel. El pivote firma una temporada colosal. Mete goles desde cualquier posición y con cualquier oposición. Es, simplemente, un titán.
El buen juego desplegado por el Bada Huesca se afeó en el inicio del segundo acto. Bidasoa tiró de la calidad individual y del grupo para arruinar las acciones en ataque del siete altoaragonés. Y en el minuto 37 la excesiva expulsión de Frank Cordiés. Sin duda, un seísmo para la defensa del Bada Huesca perder uno de sus puntales, quitar del 40×20 a un tipo que hace un trabajo fundamental para sujetar al equipo. Y Bada dejó la impresión de que el partido se le iba con el 19-22 a 10 minutos del final, pero se rehízo.
Puso el 22-22 en el minuto 53 y tuvo bola incluso para ganar el partido, pero la acción quedó invalidada con 12 segundos para el final. Y allí, un 7 metros acabó con diluir lo que iba a ser, al menos, un punto más que merecido. Sin duda, una pena que el partido 400 del BM Huesca en ASOBAL acabara en una derrota como esta.
Ficha técnica
Bada Huesca: Arguillas (p), ‘Charly’ (3), Borragán (4), Artur Parera (4), Miguel Malo (1), Frank Cordiés (1), Adrià Pérez. Siete inicial. Gabor Decsi (ps), Óscar García (2), De Souza, Ian Moya (2), Ignacio Suárez (4), Rafa Paulo (2), Nenadic (2), Samuel Cordiés.
Bidasoa: Maciel (p), Iñaki Cavero (5), Mujica (2), Esteban Salinas (4), Pedro Pacheco (3), Asier Nieto (2), Dariel García (1). Siete inicial. Failde (ps), Jetvic (2), Zabala, Gey-Emparan (1), Rodrigo Salinas (3), Furundarena (1), Boskos (1), Asier Iribar (1), Gorka Nieto.
Parciales cada cinco minutos: 1-2, 4-6, 7-7, 9-9, 10-9, 14-13 (descanso) 15-16, 15-16, 15-18, 18-21, 23-23, 25-26.
Árbitros: Ausás-Florenza. Excluidos Artur Parera y Frank Cordiés (roja directa) por el Bada Huesca; Furundarena, Asier Iribar por Bidasoa.
Incidencias: se guardó un minuto de silencio por el fallecimiento de la madre de Pachi Giné, presidente del BM Huesca, y hubo 1.747 aficionados en las gradas.
JOSÉ FRANCISCO NOLASCO, TRAS EL PARTIDO