El Bada Huesca acaba de ganar a León. Se empiezan a acabar los adjetivos para describir a la tropa de Nolasco. Empiezan las hipérboles. Y allí vale la que usted quiera. La realidad y la emoción se cogen de la mano con este equipo. Terceros de la Asobal al acabar la primera vuelta; pelos como escarpias. Y tras las pulsaciones, la mesura. No es fruto de la casualidad, no es suerte. Es trabajo, constancia, es apretar los dientes cuando en el inicio de la competición, tras una buena pretemporada, perdieron dos partidos de la que iba a ser su liga porque se quedaron sin alma.
El Bada Huesca – León de esta temporada por fin despejó la incógnita tras dos aplazamientos por la Covid-19. Maldita pandemia que hurta al público de su grada, que impide a la afición disfrutar no solo de las victorias, les ‘roba’ ver el juego, el esfuerzo, de cómo celebra los goles Adrià Pérez y las paradas de Espinha o de Arguillas. De cómo todo el banquillo salta tras cada gol o tras cada buena defensa.
Un duro León
El Bada arrancó con el cambio largo de Marcelo, los dos sietes fallando sus primeros ataques y Manolo Cadenas, técnico de León ‘indicando’ pronto a los árbitros que señalaran pasivo al ataque del Bada. Con Donlin y Semedo -tremendo el de Cabo Verde- en el centro del 6:0 de León la verdad es que no era fácil atosigar a Slavic, dueño de la portería leonesa. Bada fortificó su defensa como es costumbre. Gucek y Rodrigo entraban por Marcelo y Montoya, y a partir de allí a construir el juego.
Con dos sietes con buenas defensas, el partido cobró vistosidad. Esa tercera plaza de la Asobal en juego es más que golosa. Sobre todo si al final hay Copa Asobal. Y las buenas defensas obligaron a buenos ataques. A llevar la redonda al fondo de la red con cabeza y con genialidad. La derivada fue el equilibrio en el electrónico.
Dirigidos por Tioumentsev, Bada elaboró mucho su ataque, buscando el hueco entre una defensa de hormigón. León buscó la portería de Espinha a la máxima velocidad. Si alguien pensaba que físicamente iba a estar castigado tras jugar entre semana competición europea se equivocó. O, igual fue mejor, porque no escatimaron ni choques ni piernas para correr desde el minuto uno.
Un 7 metros de Carrillo le permitió ponerse 7-8 en el electrónico cuando el partido entraba en el minuto 16. Bada rotó. Puso a Sergio Pérez de central, entró Asier en ambos costas y León movió también su banquillo. Eso sí, el internacional Marchán siguió centrando la atención del 6:0 del Bada y Adrià Pérez horadando desde su extremo para volver a equilibrar el encuentro (9-9) rozando el minuto 20.
Con 11-10, Manolo Cadenas paró el reloj. Dos exclusiones prácticamente consecutivas no le fueron nada bien al Bada Huesca. Al menos, la lectura positiva es que con un jugador menos durante cuatro minutos, León tan solo pudo ir uno arriba (12-13). Espinha le sacó una bola a Donlin, tremenda. Y luego otra a Gonzalo, en una contra preciosa, para los Top-5 de paradas de la Asobal. Nolasco preparó la última jugada del primer acto y Marcelo metió un lanzamiento de clase para abrir la segunda parte 15-14.
De los fallos al acierto
El segundo acto se abrió con Nolasco dando la portería a Arguillas y un parcial de 0-2 que le permitió a León mandar en el marcador en dos minutos de juego (15-16). A Bada le costó un mundo que Sladic cogiera la redonda de sus redes. Falló desde los 6 metros demasiado. Y eso León te penaliza… si también estuviera acertado, aunque algún golito metía (15-17, minuto 38).
Así las cosas, con 15-18, Nolasco paró el reloj. León tenía la máxima diferencia del partido, su defensa estaba crecida y el ataque del Bada arruinado. La sequía la cortó Montoya. Al pivote del Bada le puedes mandar un ladrillo, una mancuerna rusa, lo puedes agarrar de donde quieras que se gira y encuentra hueco.
Se recuperó Bada y llegó la exclusión de un desacertado Joao Pinto. Un robo de Rodrigo Benites en defensa habilitó al siete altoaragonés para buscar el empate en inferioridad. Sladic le cerró la puerta a Asier Nieto. Llegó dos ataques después con Montoya de protagonista y que también enchufó el 20-19. El partido ha sido bello, intenso, de poder a poder durante muchos minutos. Puro espectáculo entre dos buenos sietes proponiendo un buen balonmano.
Diez minutos para cerrar un gran partido
Bada Huesca empezó a edificar mejores minutos y alimentó el sueño de la victoria con su 22-20 en el electrónico y Cadenas paró el tiempo. Con nueve minutos para el final, el duelo ya estaba en un punto muy caliente donde la impresión es que Bada estaba más enchufado que León, que creía más en sus posibilidades que el rival. Lucin ‘atropelló’ a Asier y la falta le dio el balón a Bada para buscar el +3. Lo firmó Sergio Pérez.
Cadenas puso a siete en ataque con 25-21. Y con la artillería de León, su potencial se incrementó. Por eso, la parada de Arguillas a Marchán cobró más importancia y el robo de Tioumentsev a cuatro minutos del final era (casi) medio partido. Semedo le sacó una exclusión a Benites más que discutible y el final se hizo eterno. León se puso a defender sobre toda la pista y Manolo Cadenas se desquició hasta el punto de que le costó una exclusión a su equipo. Daba igual, Bada tenía los puntos en su bolsillo.
Ficha técnica
Bada Huesca: Espinha (p), Carmona (4), Marcelo (4), Montoya (9), Tioumentsev (2), Joao Pinto, y Adrià Pérez (5). Siete inicial. Arguillas (ps), Benites (1), Gucek (), Sergio Pérez (2), Miguel Malo, Asier Nieto, Mosquera, Oier.
Ademar León: Sladic (p), Gonzalo (6), Feuchtman (3), Lucin (4), Donlin, Semedo (5), Carrillo. Siete inicial. Honrado (ps), Natan Suárez (5), Marchán (1), Pedro Martínez, Jaime Fernández, Lodos, Martínez, Piechowski, Kisselev
Parciales cada cinco minutos: 2-1, 5-5, 7-7, 9-10, 12-13, 15-14 (descanso) 15-16, 16-18, 18-19, 22-20, 25-22, 27-24.
Árbitros: Yagüe- Peñaranda. Excluidos Mosquera, Gucek, Oier, Pinto, Benites por el Bada Huesca; Semedo, Kisselev (2).