Y tras ganar el miércoles a Burgos, el Levitec Huesca se mide mañana al Cáceres. Otro partido para los de Óscar Lata con mucho en juego. Nada menos que la permanencia. Y sin tiempo casi de saborear la victoria en el duro partido contra los castellanos ni de saborearla. Toca volver a ponerse las pinturas de guerra, orillar dolencias, apretar los dientes para ser duros bajo los dos aros y templar nervios para acribillar desde el exterior al quinteto extremeño.
Saber cómo recupera su equipo es en este momento la preocupación de Óscar Lata, técnico del Levitec. El partido contra Tizona Burgos fue muy duro en lo físico y en lo mental. Había lógicas sobre la respuesta del equipo tras superar la Covid-19 y volver a la cancha cuando hay tanto en juego. Y más contra un rival con una propuesta de baloncesto diametralmente opuesta a la de los altoaragoneses.
“Cáceres agota más las posesiones”, ha dicho el técnico en rueda de prensa, pero se espera a un rival que “corra” consciente de que el estado de forma del Levitec le puede pasar factura. Puestos siempre a buscar el lado positivo ante la adversidad, Óscar Lata cree que el hecho de encadenar dos partidos con tanta premura impide a sus jugadores que se “vayan arriba” tras ganar a Burgos. La realidad es que no hay nada hecho y, opina, que las cabezas de sus jugadores contra Cáceres “van a estar frescas”.
El peligro de Cáceres
Una de las fortalezas del equipo extremeño es que saca muchos puntos en el poste bajo y se conectan bien entre los pívots, con lo que tocará trabajar mucho para desconectarlos. Óscar Lata confiesa que este Levitec Huesca no tiene condiciones para ser regular en su juego por lo que es consciente de que su quinteto tendrá altibajos, una irregularidad que ha acompañado al equipo durante esta campaña.
Las palabras de Óscar Lata fueron antes del entrenamiento. Y tenía ganas de ver a sus chicos, de su respuesta al entreno tras Burgos y para preparar el partido contra Cáceres. Al técnico gallego no le queda otra que recuperar a sus jugadores y administrar los minutos como si fuera un relojero. Deberá ajustar su plantilla en cada fase de juego.