HUESCA | El conjunto de Rafa Sanz ha cumplido con su condición de favorito y ha ganado sobre la pista del colista. Rompe así, en Algeciras, con la racha de dos derrotas consecutivas y, además, ha ganado de forma contundente. El acierto en los triples en la segunda mitad y el partido estelar de Rodrigo Gómez y Martín Iglesias fueron determinantes en la victoria. Lobe se fue al descanso con tan solo dos puntos de diferencia (39-41) y en el segundo acto sacó su mejor versión para imponerse de 22 puntos (73-95).
Rafa Sanz puso en liza de inicio a Figueroa, Breacdy, Vázquez, Shelist e Iglesias para proponer un baloncesto contra un rival en una mala espiral de resultados. Peñas inició el partido con determinación, fuerte, sabedor del trabajo que debía desarrollar. Vázquez e Iglesias sorprendían con sendas canastas bajo el aro. Algeciras apretó liderado por su pivot Efambe y bien secundado por el acierto de Chuso González.
Rafa Sanz dio entrada a su segunda unidad y el equipo se sobrepuso a la intensidad y el carácter que hacían gala los de Javier Malla, con Rodrigo Gómez y Cuéllar haciendo daño desde más allá del 6,75 metros. El partido entró una dinámica de intercambio de canastas. Un triple de Breacey situó a los altoaragoneses por delante en el marcador (18-19) El cuarto cerró con (21-19)tras un postrero 2+1 de los andaluces.
El segundo cuarto trascurrió con poca anotación. A los dos equipos les costaba encontrar el aro, con muchas imprecisiones y bajos porcentajes. Iglesias se convertía en el amo y señor de los rebotes, hasta 7 ofensivos durante los primeros 20 minutos. Ningún equipo lograba escaparse en el marcador y las rentas no superaban los 3 puntos por ninguno de los dos quintetos.
El tercer acto comenzó con un momento duro para los peñistas que llegaron a perder hasta tres balones de manera consecutiva. Rafa Sanz enderezó la situación y sus pupilos encarrilaron un juego muy sólido, de bastante nivel. Abdulsaman despertó y se hacía fuerte en la pintura, clave para meter diferencias en el electrónico. La ventaja crecía a cada minuto que pasaba gracias al acierto en los triples de Rodrigo Gómez (50-64). Lobe lograba 20 puntos en los seis primeros minutos de cuarto. El dominio del rebote era otro aspecto clave (31 rechaces por 20 de los locales) y amansó una importante ventaja con solo un cuarto por disputarse (54-69).
El definitivo cuarto se pudo apreciar la mejor versión peñista con un baloncesto total, cimentado en una intensa defensa, dominio del rebote y un gran acierto en el triple. Los andaluces, a pesar de las desventajas, no se rindieron tratando de anotar en ataques rápidos en los primeros segundos. Sin embargo, Lobe era más efectivo con Rodrigo y Figueroa taladrando el aro local desde el perímetro. Al final la renta creció hasta los 22 puntos (73-95).