Varane hizo pedazos el trabajo del Huesca por sacar un resultado positivo contra el Real Madrid. El delantero francés empató con su espalda el golazo de Galán que adelantaba a los de Pacheta y en el 85 cazó un centro de Casemiro para dar la victoria a los de Zidane. Los dos goles del Madrid surgieron de falta. La primera provocada por Gastón Silva, clara; la segunda, de Mir, más que dudosa.
Cuando la diferencia de presupuesto es abisal, los partidos contra el Real Madrid suelen finiquitarse con suero o champagne; puerta grande o enfermería. Luego está lo que hace grande este deporte. Cosas intangibles que equilibran las diferencias. Se podrá argumentar que el Madrid vino a El Alcoraz con lo justo. Pero ese es su problema, no el de un Huesca que, pese a la derrota, cada vez cree más en Pacheta.
Igual será difícil coger al considerado mejor equipo del mundo, Pacheta dixit, en esta misma situación -llegó con un banquillo en el que era imposible agotar todos los cambios-, pero bueno, será otra historia, ojalá sea otra historia para escribir.
Pacheta, fiel a su sistema
Pacheta no guardó arma alguna ni cambió su filosofía. Con su sistema a muerte y en el ataque, con todo, Okazaki y Mir para buscar a Courtois. El Huesca se fue de inicio a por el Madrid y a los 3 minutos, Mir -buen duelo con Varane- robó una bola, metió su tremenda zancada para sacar metros a Nacho y poner una bola extraordinaria a Okazaki. Dos minutos después, el delantero murciano buscaba con su zurda las mallas del belga. Confianza absoluta la del chaval y más tras su hat-trick al Valladolid.
Desde el inicio, Seoane cogió su compás y marcó el ritmo de juego de un Huesca de buen fútbol, que mordía y que no sufría contra un Madrid que llegó espoleado por las declaraciones de Zidane. Sus chicos cosieron su mejor fútbol desde la individualidad. Es lo que tiene la calidad de tipos capaces de armarte el taco -Vinicius marchándose de Maffeo y Mendy anteriormente cruzándose medio campo- y arruinarte la tarde.
Un error de Doumbia llevó el miedo a las filas del Huesca. Por fortuna llegó Pulido veloz para que Asensio no engatillara. Y es que el Madrid, con Kroos al mando, empezaba a enseñar los dientes con Vinicius y Asensio haciendo daño por la banda de Maffeo.
Álvaro sacó una bola a Benzema que disparó tras dejársela de tacón Modric. Ese era uno de los problemas del Madrid por muy mermado que esté: la calidad de su tropa. Sean o no titulares. Conforme pasaron los minutos, el Huesca se fue metiendo cada vez más atrás y eso era muy peligroso con tantos minutos por disputar. Y tan atrás estaba que atacar con sentido era una quimera. Mir cada vez más solo, Okazaki bajando a ayudar y el centro del campo intentando recuperar la bola para oxigenarse sin que el Madrid le dejara.
La lluvia podía ser aliada del Huesca. Sobre todo conforme pasaran los minutos y fueran necesarios recambios. La impresión es que el Huesca tenía más variantes que un Madrid más que justito. Y en la primera jugada del segundo acto, Rico la puso en el travesaño. Galán metió el balón a Maffeo que puso la bola al vasco. Con con un leve toque la mandó al palo largo. El gol del Huesca lo firmó Galán en una contra de pura inteligencia de Okazaki. Cuando parecía lógico el centro a Mir vio al extremo que llegaba solo para batir a Courtois.
Feo empate del Madrid
En otra contra Seoane le puso un balón cinco estrellas a Rafa Mir que llevó el balón al palo. Estaba el Huesca desatado, desarbolando al Madrid a la contra y, sobre todo, creyendo en sus posibilidades. La ilusión duró 7 minutos. Un balón que pierde Pulido, Gastón Silva que se ve obligado a hacer falta y Benzema la envía a la cruceta. En el apelotonamiento bajo el larguero, Varane la metió de espaldas. Feo, pero efectivo.
El partido empezaba a calcar lo visto en el primer acto, aunque el Huesca tuvo una ocasión clara. Jugadón. Galán centró milimétricamente a Mir que exigió al máximo a Courtois para meter su manopla izquierda al violento cabezazo del delantero del Huesca en el minuto 64.
El Madrid volvió a generar peligro y el Huesca a lamentar las ocasiones perdidas. Álvaro le quitó el gol a Benzema y Marcelo ajustó demasiado al palo izquierdo y se le fue. No eran buenas noticias para los de Pacheta. Y es que el Madrid encadenaba jugadas en el balcón del área altoaragonesa necesitado no de asustar, otra vez, sino de marcar.
En un resbalón, Gastón Silva barrió a Asensio. Una maldita falta… que acabó en una contra con Rafa Mir lanzando. Pacheta decidió quitar a Doumbia para poner a Ontiveros e ir a por el partido. Con el partido roto, Benzema no desequilibró el marcador porque Álvaro, que amargó al francés, puso el pecho a un disparo a bocajarro en el 78.
Una falta más que discutible de Rafa Mir permitió a Kroos botar una falta, Casemiro cazó el centro y pico de cabeza el balón para que Varane, al que Siovas perdió la marca, rematara a gol. El Madrid castigaba a un Huesca que seguro que lamentó las claras ocasiones perdidas.
Ficha técnica
SD Huesca: Álvaro Fernández; Pulido, Siovas, Gastón Silva (Ferreiro 85’); Maffeo, Mikel Rico (Juan Carlos 85’), Doumbia (Ontiveros 75’), Javi Galán; Okazaki (Escriche 61’) y Rafa Mir.
Real Madrid: Courtois; Mendy (Marvin 77’), Nacho, Varane, Odriozola (Marcelo 67’); Modric, Casemiro, Kroos; Vinicius (Mariano 77’), Benzema, Asensio.
Goles: 1-0 Galán min.47, 1-1 min. 54 Varane. 1-2 min 84 Varane
Árbitro: Estrada Fernández. Amarilla Kroos 31’, Maffeo 44’, Gastón Silva 52’.