HUESCA | El Huesca acaba de empatar contra el Amorebieta, sale de la zona del descenso, pero deja claro que carece de pólvora. Ha gozado de ocasiones, Álvaro ha sacado un par de balones claros y sigue el sufrimiento de los de Hidalgo. Al menos, para el cajón del optimismo, si hoy hubiera terminado la temporada se hubiera salvado. Aquí, el que no se consuela es porque no quiere.
La liga empieza a cerrarse y cuando peleas por la permanencia todos los partidos son importantes, más cuando son contra rivales directos. Los de Hidalgo necesitan cabalgar de tres en tres para alejarse cuanto antes del descenso y evitar el actual tobogán de depender de ti y de otros. Hidalgo metió de inicio a Vilarrasa, Kortajarena y Hugo Vallejo como novedades respecto al que propuso contra el Eldense. Y quizá sorprendió la ausencia de Joaquín y Javi Martínez, dos de sus soldados durante muchos partidos. Castro, por su parte, sacó los mismos con los que ganó al Elche.
Los vascos dieron el balón al Huesca y juntaron sus líneas en 30 metros. El Huesca amasó una y otra vez el balón en busca del hueco y de que Valentín metiera la directa por la banda derecha o encontrara la bola cuando la buscaba por el interior. Lo consiguió en varias ocasiones, pero sus centros se perdían en el bosque de piernas de la defensa rival.
Así las cosas, con dos equipos encastillados, a balón parado era la única oportunidad de encontrar la portería de Campos. La primera ocasión de gol del Huesca llegó de la mano de Gerard Valentín con un centro a la cabeza de Pulido que sacó el portero del equipo vasco en el segundo palo. Lo mejor para el Huesca es que el Amorebieta dejara de estar perfectamente acuartelado. Ese paso adelante sirvió para abrir huecos, pero los de hidalgo no encontraron el pase final o dos centrales veteranos como Etxeita y Bustinza arruinaban las opciones que buscaba Obeng o cortaban los centros al área.
El partido se abrió en el segundo acto fruto de los errores de ambos equipos. Y el primero en avisar el Amorebieta con un disparo de Carbonell al que respondió Álvaro perfecto. El riojano volvió a sacar otro balón de oro. En este caso a Raiko tras un jugadón de Dorrio. Y eso volvía a ser una mala señal para los de Hidalgo porque era tu portero quien se vestía con el traje de héroe… contra quien cierra la Segunda.
Hidalgo agitó el banquillo y cambio fichas; Lombardo, Joaquín y Blasco por Hugo Vallejo, Elady y Nieto. De un error del Amorebieta, el Huesca pudo sacar petróleo. Joaquín exigió a campos para evitar el tanto. Si el primer acto fue una oda al fútbol horizontal, el segundo se quitó los topes y empezaron a volar las ocasiones. Y era de agradecer. Si en el primer acto, el Amorebieta le cedió el balón al Huesca, se invirtieron los papeles en la segunda parte.
Ambos equipos pisaron área y tras la tormenta de oportunidades todo se calmó. Allí puso el Huesca el dominio y el Amorebieta la defensa ordenada. Aún así la tuvo Javi Martínez con un cabezazo en plancha que sacó campos con autoridad a cinco minutos del final. Y luego fue Joaquín quien exigió al portero del Amorebieta que sujetaba sin apuros a su equipo y desnudaba la carencia de gol del Huesca.
Ficha técnica
SD Huesca: Álvaro Fernández; Vilarrasa, Loureiro, J. Pulido, Nieto (Blasco 54’), Valentín; Sielva, Kortajarena (Javi Martínez 63’), Hugo Vallejo (Lombardo 54’); Obeng (Bolívar 81’), Elady (Joaquín 54’).
Amorebieta: Campos; Garreta, Etxeita, Bustinza; Seguín (Edwards 81’), Sibo, Carbonell (Yriarte 71’), Núñez; Rayco (Morcillo 63’), Dorrio (Lasure 81’); Iker Unzueta (Jáuregui 71’).
Goles:
Árbitro: Sánchez López. Amarilla Nieto 3’, Carbonell 28’, Sielva 90’.
Incidencias: partido disputado en El Alcoraz con 5.630 aficionados en las gradas.