Patricia Genzor (Zaragoza, 1991) es la capitana de la Escuela Waterpolo Zaragoza y lleva 17 de sus 27 años inmersa en el agua y en mejorar cada día en el mundo del waterpolo. El equipo compite en la máxima categoría nacional y a falta de 5 jornadas, cuenta con muchas opciones de mantener la categoría una temporada más. Hemos hablado con ella.
Prácticamente se puede decir que llevas toda la vida dedicada al waterpolo…
Cumpliré 17 años en el waterpolo en esta temporada. Empecé en alevín con 11 años. Desde muy pequeñita empecé a nadar, siguiendo los pasos de mi hermana. Estábamos en el Helios y a través de unas jugadoras que competían nos plantearon si queríamos entrar en el equipo de waterpolo, y así lo hicimos.
En las temporadas 2010/11 y 2011/12 disputasteis la competición europea, la Copa LEN. ¿Qué recuerdos tienes?
Ha sido mi mejor experiencia en estos 17 años en el waterpolo. Es un premio a todo el esfuerzo de los entrenamientos. Fue un crecimiento personal y colectivo muy grande. Estuvimos en Italia, Grecia y Siberia.
¿Notabas diferencia en cuanto al seguimiento en esos países respecto a España?
La verdad es que en lo que es Zaragoza no nos podemos quejar de afición porque la nuestra es tremenda. Fuera de España sí es cierto que se notaba que al waterpolo se le daba más importancia. Las gradas y las piscinas eran impresionantes.
Hablas de que vuestra afición es tremenda, y es que en cada partido hay más de 100 espectadores, unas cifras excelentes en este deporte…
El apoyo de la grada para nosotras es súper importante. Aquí en Zaragoza, al estar solo nosotras como único equipo hace que la gente nos arrope más y formemos una piña. Se nota un montón a la hora de los partidos.
La gente nos arropa y eso hace que formemos una piña
¿Qué problemas habéis tenido durante la pretemporada que os impedían entrenar en plenas condiciones?
En 17 años ha sido la peor pretemporada que he tenido. Había unos problemas con la caldera de la piscina del Parque de Bomberos que es donde entrenamos. En teoría se iba a solucionar a principios de septiembre, pero se fue alargando tanto que empezamos la liga sin haber tocado un balón. Nos dedicábamos a nadar en el Palacio de los Deportes que es una piscina en la que hacemos pie y no podemos ni meter porterías. Es como si a un equipo de fútbol once le dan medio campo de fútbol sala para entrenar. Es cierto que no lo podemos usar de excusa porque no lo podemos usar de excusa ya que al resto de equipo cuando juegan contra nosotras les da igual lo que hayamos entrenado o no. Para la tercera jornada de liga ya empezamos a tocar balón.
Imagínate que a un equipo de fútbol 11 le dan para entrenar medio campo de fútbol sala. Así estábamos en pretemporada
¿Qué ritmo de entrenamientos lleváis?
Entrenamos de lunes a viernes todas las tardes, unas dos horas. Lunes, miércoles y viernes lo hacemos en el Parque de Bomberos, que son los únicos días en los que podemos tocar balón. Martes y jueves entrenamos en el Palacio de los Deportes, pero ahí solo podemos nadar y hacer gimnasio. Además, dos días también entrenamos por las mañanas solo lanzamientos a puerta.
Ahora mismo, faltan 5 jornadas para la conclusión de liga y el equipo se encuentra fuera del descenso, pero todavía tenéis que jugar contra los dos rivales directos -Moscardó y Concepción-. Y este sábado a las 18.00 horas, partido ante el Mediterrani. ¿Sois optimistas?
Necesitamos puntos en uno de los dos partidos. Matemáticamente con puntuar en uno de los dos partidos nos valdría, pero con lo dura que ha empezado la temporada, nuestra intención es puntuar en los dos partidos. Pero por supuesto, no renunciamos a nada este sábado ante Mediterrani.
Nuestra intención es puntuar ante Moscardó y Concepción
Tu carrera se ha desarrollado de forma casi paralela a la de Andrea Blas, un mito del club que ya puso punto y final a su actividad profesional en el waterpolo…
Andrea es la mejor jugadora de la historia del club. Yo lo he vivido todo con ella, desde que empezamos juntas cuando nos subían con las mayores, en selecciones, en competición europea… Todos esos procesos han sido con Andrea. Es verdad que el waterpolo ocupa mucho tiempo y al final la gente lo tiene que dejar por motivos de trabajo. Andrea lo tuvo que dejar por sus motivos. El contacto sigue estando presente.
Mientras Andrea era internacional con la selección, España ganó la medalla de plata en los JJOO de Londres 2012 y el oro en el Mundial de 2013. ¿Cómo lo vivisteis?
En las final de Londres nos juntamos en mi casa varias jugadoras y los jugadores del equipo masculino. Era un orgullo que estuviese una jugadora de Zaragoza allí y fuimos a recibirla a la Estación. Al mundial de 2013 -en Barcelona- fuimos a verla. Cuando Andrea estuvo en esa época de selección tuvo una repercusión increíble y se apuntaron a la Escuela un montón de niñas.
Es un orgullo que una jugadora de la casa gane el Mundial y consiga una medalla de plata en los JJOO
¿Y qué os pide el técnico, Fran Orizo?
Fran es un entrenador muy exigente, pero yo creo que al nivel que jugamos tiene que ser así. Es muy intenso y nos pide esa intensidad y compromiso.
Y por último, sí que parece que vivimos un mal momento para el waterpolo, más concretamente el femenino, en materia de patrocinios…
Del mismo modo que la gente se tiene que arriesgar por conocer el deporte, lo mismo con las empresas. En su momento tuvimos un patrocinador -Cablescom- y fueron los mejores años cuando nos clasificamos para Europa. Desde entonces, vino la crisis y no hemos vuelto a encontrar un patrocinador. Al ser femenino y deporte minoritario, las empresas no apuestan. Estaría bien que se arriesgasen un poquito, que al final merece la pena.