ZARAGOZA | El Real Zaragoza se asegura el futuro del último hallazgo de su cantera: Pau Sans.
La araña seguirá ligada al club de su vida hasta 2029, en un movimiento estratégico, feliz para la afición. Su irrupción en esta temporada parece ya consolidada, en el curso en el que se ha estrenado con el primer equipo y ha sido el autor intelectual de dos de las remontadas. Pau Sans representa el juego original, el deseo de la juventud también en la élite. Su juego se explica desde el barrio y el fútbol de calle, desde la pista en la que todo empezó.
Sans, de 19 años, se acerca a la veintena de partidos con el primer equipo. Con el de ayer suma 2 goles en el club de su vida, en el lugar en el que siempre quiso jugar. Hoy extiende su tela de araña hasta 2029, con la intención de escribir una historia ilusionante. Su partido de ayer representa lo que Pau siempre fue. Un fútbol imberbe, descarado, resuelto por el carril de la calle. Pícaro y sonriente, vivirá una historia interminable.
El anuncio tuvo una bonita premonición, un recuerdo al inicio de esta historia. Una pista de barrio, en su urbanización, en la que aprendió a jugar. Lo mejor de Pau es que al ver su juego uno descubre el niño que entonces fue. El futbolista en ciernes que pedía una prórroga del tiempo, que se hacía el sordo cuando su madre le llamaba para volver a casa.
Jorge Serrano, de Palmadas al Viento, estaba junto a Fabio Conte y tantos otros en aquellos partidos. En la primera entrevista de Sans, le preguntó por qué siempre había elegido quedarse, silenciando grandes propuestas: “Porque es el Real Zaragoza”, contestó Pau Sans.
Y esa respuesta, hoy más que nunca, le da sentido a todo.