Los dos últimos clasificados de la liga Adecco Oro, Clínicas Rincón y Peñas Huesca, muestran el peor registro de derrotas en esta temporada; ambos acumulan 7 en su casillero.
Jugadores del peñas celebrando una victoria | Foto: sporthuesca.com – C.PascualEl partido de esta semana para el CB Peñas debe ser el punto de inflexión para seguir sumando puntos y poder lograr el objetivo final, la salvación.
El equipo filial del Unicaja, el Clínicas Rincón, no gana un partido desde el pasado 14 de diciembre frente al Oviedo por 80-83. Tras ese choque, siete derrotas consecutivas: Planasa Navarra, Cocinas.com, Melilla, Palencia, Lleida, Valladolid y Ford Burgos en la anterior jornada liguera. El equipo malagueño apenas ha logrado ganar 4 partidos frente al Leyma Coruña, Palma Air, Prat Joventut y el ya mencionado equipo asturiano. La media anotadora del próximo rival peñista es de 63’3 puntos, la peor marca de la liga.
El Peñas, con una victoria más que el Clínicas, pero un partido menos, se encuentra en la penúltima posición de la liga acumulando nada menos que siete derrotas consecutivas. Los oscenses no ganan desde la jornada 12 (9 de diciembre) tras salir victorioso en casa con un 74-63 al Cocinas.com. Tras ello más de media docena de derrotas: Melilla (79-72), Palencia (66-81), Lleida (66-59), Valladolid (84-79), Ford Burgos (51-76), Breogán (58-74) y Leyma (77-74).
Cinco son los partidos que ha ganado el Peñas, todos ellos en casa: Leyma (83-73), Clínicas Rincón (91-56), Palma Air (71-70), Oviedo (72-71) y Cocinas.com (74-63). Los verdes consiguen anotar una media de 70’6 puntos por partido.
Temporada 2010/11, peor racha de derrotas
“Marcha Verde” en Lérida en el 2011 | Foto: cbphuesca.netEl Peñas volvió a la LEB Oro en la temprada 2010/11. Tras el ascenso de LEB Plata el año anterior y la Copa LEB Plata, los oscenses volvían a la segunda liga española del baloncesto.
La temporada fue dura, con un comienzo complicado tras sumar 5 derrotas consecutiva en los primeros partidos; pero esta no fue la peor racha del Peñas, desde la jornada 11 a la 19, cosecharon 8 derrotas consecutivas. Los de Quim lograron salvar la categoría sobre la bocina al ganar en el último partido de la temporada (78-106) al Lleida. El bagaje de aquel curso fue de 12 partidos ganados y 22 perdidos.