El tridente atacante de la SD Huesca está marcando la diferencia en la parcela goleadora en lo que llevamos de temporada.
Los delanteros del conjunto azulgrana (Borja Lázaro, Urko Vera y Cmiljanic) no están dando el rendimiento esperado, de eso no hay duda. No hay más que ver las estadísticas hasta ahora, y es que solo uno de los once goles que ha anotado el Huesca proceden de ellos. Es más, dicho tanto llegó en el último partido, es decir, en la 10ª jornada.
Para suplir esta carencia, el rol goleador de los de Anquela lo está asumiendo el tridente ofensivo que acompaña por detrás al delantero centro. La banda izquierda originalmente ocupada por David Ferreiro y actualmente por Álvaro Vadillo, la derecha por Alexander González y la mediapunta de Samu Sáiz, el gran factor diferenciador del equipo. Este último fue el encargado de abrir el marcador de los altoaragoneses esta temporada, en la segunda jornada contra el Nàstic, y el único que no se sumó a la fiesta goleadora en la última victoria por 3-0 ante el Mirandés, en la que sí estuvieron Vadillo y Alexander.
Todos ellos han anotado esta campaña, siendo Samu el que más lo ha hecho, hasta en tres ocasiones, seguido de Vadillo, con dos, a pesar de ser el que más tarde se ha incorporado a la dinámica del equipo.
La rapidez, calidad y desborde de estos tres futbolistas es sin lugar a dudas lo que está marcando la diferencia en la parcela ofensiva de la Sociedad Deportiva Huesca, siempre ayudados, por supuesto, por el trabajo de Juanjo Camacho (que además lleva dos goles), que estará un mes de baja por lesión.