Podoactiva y la Fundación Alcoraz han puesto en marcha la campaña “Pisa bien, crece mejor”. Esta iniciativa tiene el objetivo de prevenir posibles lesiones o molestias en los niños, niñas y jóvenes deportistas a través de un estudio de la pisada y de los posibles problemas asociados a la misma.
En la acción, que comenzó ayer, participarán 132 chicos y chicas pertenecientes a las categorías inferiores de la SD Huesca. Todos ellos se someterán a un estudio biomecánico en las instalaciones de la Clínica Podoactiva Huesca que permitirá identificar la necesidad de adoptar tratamientos para prevenir la posible aparición de lesiones. Se desarrollará hasta el próximo 19 de noviembre.
Ambas entidades demuestran así su compromiso con el fomento de los hábitos de vida saludable en la sociedad oscense. Y es que la actividad física en edades tempranas, corresponde a años clave en los que se puede diagnosticar, corregir y prevenir problemas derivados de la pisada que se manifiestan en la edad adulta.
Víctor Alfaro, director general de Podoactiva, ha manifestado su “ilusión por formar parte de una acción tan importante”; un proyecto “cercano a nuestra tierra y a los chicos y chicas jóvenes”. Alfaro ha añadido que “nuestro vínculo con la Fundación Alcoraz está muy consolidado y es un orgullo trabajar con ellos”.
Javier Cruz, director de Fundación Alcoraz, se ha mostrado muy contento con esta iniciativa. “Es una grandísima noticia que nuestros jugadores y jugadoras puedan contar con la experiencia y el saber hacer de esta compañía puntera oscense”, indicaba.
Prevención en edades tempranas
En edad infantil es recomendable realizar la primera visita al podólogo a los cuatro o cinco años para hacer una primera valoración. Con un estudio biomecánico de base y acudiendo a consulta al menos una vez al año se puede supervisar la evolución de la pisada y detectar posibles problemas derivados. Esto puede ayudar a prever la posible aparición de dolencias y lesiones que pueden terminar manifestándose a medio o largo plazo en edad adulta.
Una vez llegada la adolescencia y la juventud, la práctica deportiva incrementa la probabilidad de sufrir molestias y lesiones. Por ello, es muy importante la valoración y el seguimiento de la pisada de forma recurrente. Una buena exploración biomecánica y de pisada puede evitar un alto porcentaje de lesiones derivadas de un mal gesto deportivo.