Casademont Zaragoza no depende de sí mismo para acceder de ronda en la FIBA Europe CUP. Debe ganar sus dos próximos partidos, remontar un average y esperar. Por tanto, “está muy complicado”, reconoce el técnico Jaume Ponsarnau. No obstante, no tira la toalla y apela a hacerlo “lo mejor posible”. Ese es el “compromiso” que deben mostrar, sobre todo para “seguir creciendo”.
Muy nerviosos
Lamenta que en el partido de este miércoles ante Avtodor Saratov empezaron “muy nerviosos”, tanto en ataque como en defensa. Una circunstancia que pudieron voltear en la segunda parte gracias a la “energía” y a los “puntos de Okoye y Waczynski“.
“Todo estaba para ganarlo pero tomamos malas decisiones que nos llevaron a la prórroga. Ahí ellos estuvieron acertados y nosotros no encontramos las mejores opciones“, sintetiza.
