La venta del Real Zaragoza sigue siendo una historia interminable. El relato se escribe a través de despedidas, giros de guión, fracciones de verdad o medias mentiras. La opción estadounidense, liderada por Jorge Mas Santos, parece la única vía para la parte del consejo que representa Fernando de Yarza. El Grupo Orlegi, que había perdido el pulso en los últimos días, no firma su rendición definitiva. Existe una sospecha: a César Alierta le seduce más la tentativa mexicana.
Mientras, Christian Lapetra se despide del club con una carta en la que pide perdón si no estuvo a la altura. Tranquilo por un detalle esencial: “hay un proceso de venta del club en su fase final”. La duda que le surge a todo el mundo es cuánto durará ese proceso. Y cuando es lícito empezar a aburrirse.
La opción estadounidense, la mejor situada en la venta del Zaragoza
Jorge Mas Santos propone algunas luces: la recapitalización del club, la refinanciación de la deuda, la modernización de las instalaciones, el aumento del techo salarial y el desarrollo de un club más competitivo. Esto último a través del concepto de Academia. Probablemente porque el de cantera, ya existente, le resulta demasiado lejano.
El desarrollo del Inter de Miami es incuestionable y no se entiende sin la aportación de Jorge Mas al proyecto de David Beckham. Y el empresario de origen cubano ha probado su solvencia, por mucho que la inversión anunciada se haya rebajado en las últimas horas. De la cantidad cercana a los 20 millones de euros ha quedado una que está más próxima a los 15 (16 millones de euros). Pese a todo, su ambición y su fortuna son las mayores garantías para su llegada a Zaragoza.
Alierta, MasTec, Telefónica y Sintel
Los años de Jorge Mas como empresario arrojan algunas sombras, especialmente en España. El caso Sintel se resolvió con un acuerdo extrajudicial por parte de los representantes de MasTec, que salpicó a la familia Mas.
El director de Telefónica en el momento de la firma era Juan Villalonga. César Alierta, hoy el máximo accionista del Zaragoza, le sucedió después y se refirió al proceso con un término: “desgraciada herencia”. En estos días, en los que se da por cerrado el acuerdo entre Jorge Mas Santos y el Real Zaragoza, conviene recordar unas declaraciones de Alierta que recogió el diario El Mundo: “fue una ingeniería financiera, una estafa para los españoles y una burla para los accionistas, trasladada a islas vírgenes y envuelta en compañías intermediarias”.
El Grupo Orlegi, en estado de espera
Las probabilidades de Orlegi Sports se han reducido, pero no parecen completamente agotadas. El Periódico de Aragón anuncia que el grupo mexicano sitúa el 11 de marzo como la fecha límite para encontrar una respuesta. Recabó información sobre el Real Zaragoza a través de La Liga y el CEO del grupo mexicano, Alfonso Villalba, se ha reunido con todas las partes del consejo.
Si el rechazo es definitivo, el grupo mexicano se lanzará a buscar más propuestas en el fútbol español. Y no se sabe bien si lo hará por ambición o por despecho.
La historia, como era de esperar, se complica. Ninguna venta fue sencilla y menos en un contexto tan particular como el del Real Zaragoza, que mantiene unos 68 millones de deuda. El laberinto se enreda: la subasta no está completamente cerrada y la guerra informativa se mantiene. Mientras tanto, el aficionado ya no sabe a quién creer o si se puede querer a alguien.
